Mariana Travacio: “Escribo con todo lo que me compone como persona”

Mariana Travacio nació en Rosario y de chica son su familia se mudó a Brasil. Allí estudió en el Liceo Francés y aprendió portugués. Su vida navega entre tres lenguas, si sumamos el español. “En casa había libros en francés”, contó, pero un día su madre rompió la tradición y se apareció con dos libros que fueron definitorios para su vocación de escritora: “Cien años de Soledad”, de Gabriel García Márquez, y “La casa verde”, de Mario Vargas Llosa.

“Quedé fascinada y en ese momento decidí que mi lengua era el español”, afirmó al recordar esa epifanía adolescente al hablar con Eco de Radio por Radio Universidad. Más allá de los autores mencionados, Travacio halló en Juan Rulfo su referencia. El autor de “Pedro Páramo” le sirvió para explicar que darle una voz al personaje es fundamental.

“Rulfo decía que para empezar un texto necesitaba contar con un personaje, el ambiente donde se movería y encontrar su  manera de hablar”, describió. Para fortalecer esta idea citó a Jorge Luis Borges: “Cuando se encuentra la sintaxis de una voz, se encuentra un destino”.

Volviendo a Rulfo, lo definió como “un gran maestro” que ayudó con sus textos a muchos escritores. Por ejemplo, Travacio contó que el mismísimo García Márquez, en su autobiografía “Vivir para contarla”, narró cómo su amigo Álvaro Mutis le “tiró sobre la mesa” un libro de Rulfo para que aprendiera el oficio.

En ese sentido, Travacio puso como ejemplo el personaje central de su libro “Quebrada”, llamado Lina, tomado de una noticia que salió en los diarios: se trata de una maestra rural que sufrió un accidente mientras andaba en mula. Y a la autora le llamó la atención una frase de la mujer: “Yo que me andaba a las patadas con Diosito”. Esa línea le dio la voz y el tono del personaje.

Travacio es licenciada en Psicopedagogía y dio clases de Psicología Forense. Consultada sobre si asoma la psicóloga en sus historias, manifestó: “Se escribe con todo lo que nos compone como personas”.

Algunos de sus libros fueron publicados en España. Para la escritora, publicar un libro implica una cadena de eslabones que van desde el autor, el editor y el librero amable que recomienda el texto. “Al publicar se arroja una botella al mar que navega y uno no sabe si va a llegar a la orilla. Cuando toda esa cadena funciona y aparece el lector, es conmovedor”, concluyó.

Ficha técnica

Mariana Travacio es rosarina, vivió de niña en Brasil, se recibió de licenciada en Psicología por la Universidad de Buenos Aires, fue docente en la cátedra Psicología Forense y reside en Buenos Aires.

Publicó los libros de relatos “Cotidiano” (2015), “Cenizas de Carnaval” (2018) y “Figuras infinitas” (2021) y  las novelas “Como si existiese el perdón” (2016, 2020), “Quebrada” (2022) y “Me  verás caer” (2023). Recibió premios nacionales e internacionales y fue traducida a varios idiomas.