Al Mirasol no le alcanzó con el debut de Bazán Vera para salir de perdedor

Sigue a la deriva, la Fragata. Cambian los conductores en el timón, pero el rumbo sigue siendo incierto. Ni siquiera la llegada de un ídolo como Daniel Bazán Vera logra que Almirante Brown salga de perdedor. Esta vez, el verdugo fue Almagro, que con muy poco lo venció este sábado por 1 a 0 y lo dejó sumergido en el fondo de la tabla de posiciones.

Con apenas un par de días de trabajo, era imposible imaginar que el Indio iba a cambiar la imagen de un equipo que viene a los tumbos. Pero sí podía esperarse que, con su aura, al menos se frenara la caída libre que está protagonizando el elenco aurinegro. Pero ni eso sucedió.

Un córner bien pateado. Con eso solo le alcanzó al Tricolor para quedarse con una victoria que valió más que los tres puntos que estaban en juego, dada la complicada situación que atraviesan ambos equipos. Ocurrió a los 38 minutos del primer tiempo, cuando, luego de un tiro de esquina, Matías Molina se aprovechó del estatismo de la defensa aurinegra para cabecear en soledad y marcar lo que sería el único gol del encuentro.

En el complemento, Almirante volvió a exhibir todas sus carencias futbolísticas, las mismas que viene mostrando desde que se inició el campeonato. Pero al menos mostró algo de vergüenza y rebeldía para tratar de igualar el marcador.

Quizás, el empate hubiese sido un premio merecido a esa búsqueda. Porque, a los tumbos y de manera desordenada, el Mirasol pudo generar un puñado de situaciones de peligro. Dos de ellas fueron claras: una pelota que Rivero increíblemente no pudo empujar abajo del arco y, sobre el final, un cabezazo en soledad de Leguizamón que se fue desviado.

Cada vez más abajo

Esta nueva derrota, la séptima en los trece partidos que disputó en el torneo (el resto son cinco empates y un solo triunfo), deja al elenco matancero en el último lugar de la tabla, junto a Brown de Adrogué. Aunque, si el equipo de Pablo Vicó logra sumar ante Colón este domingo, Almirante quedará solo en el sótano de las posiciones.

El panorama que se avecina es preocupante. El derrumbe no se detiene. La llegada del máximo ídolo del club, al menos en su debut, no alcanzó para torcer la historia. Todavía hay mucho camino por recorrer, es cierto. Esa es la única buena noticia que hoy tienen los hinchas del Mirasol. Y también el Indio Bazán Vera, que este sábado, en cancha de Almagro, confirmó que tiene mucho trabajo por hacer.