El Mirasol no tuvo ideas y tuvo que conformarse con un empate que no le sirve de mucho

Pese a jugar con uno más durante casi una hora, el equipo aurinegro no supo cómo quebrar a Gimnasia de Mendoza y terminó igualando sin goles en un encuentro en el que se lo vio muy errático y deslucido. Germán Rivero falló un penal en el inicio del partido. Se viene el clásico ante Nueva Chicago, en Mataderos.

Los empates siempre tienen una doble mirada, de acuerdo a los contextos en los que se presenten. Y así como el 0-0 de la fecha pasada ante Gimnasia y Tiro de Salta fue recibido con una prudente satisfacción, esta otra igualdad sin goles que Almirante Brown cosechó en la tarde de este lunes, ante Gimnasia y Esgrima de Mendoza, solo dejó bronca y desencanto.

El encuentro pudo haber tomado un camino más placentero para el Mirasol en el mismo arranque. Porque, a los tres minutos, Nahuel Viñas cobró acertadamente un penal para el elenco matancero por mano de un defensor visitante luego de un córner. Germán Rivero se hizo cargo de la ejecución, pero su disparo fue desviado por el arquero Luis Ojeda.

Almirante sintió el impacto por la chance desaprovechada. Siguió empujando, pero sin la lucidez que había mostrado en los últimos partidos. Sin embargo, el destino volvió a hacerle un guiño a los 38 minutos, cuando Viñas le mostró la segunda tarjeta amarilla a Fermín Antonini y dejó al conjunto mendocino con un jugador menos.

No obstante, lo que se suponía que iba a ser una ventaja para Brown terminó siendo un laberinto sin salida. Porque, en el complemento, el equipo de Rodrigo Alonso, más allá de  un par de córners peligrosos y una buena jugada de Brian Fernández que no pudo ser capitalizada por Pío Bonacci, no supo cómo generarle peligro al Lobo mendocino.

Encontrarle algún aspecto positivo a este 0-0 resulta difícil si se analiza que Almirante desperdició un penal y jugó casi una hora con un futbolista más. Pero la fría estadística también arroja un dato alentador que los más optimistas pueden enarbolar: Brown lleva cuatro partidos invicto y sin recibir goles.

Se viene el clásico

En la próxima fecha, el conjunto aurinegro tendrá uno de los compromisos más esperados por sus hinchas: el clásico ante Nueva Chicago, en Mataderos. Será una posibilidad inmejorable para olvidarse de este insulso empate ante Gimnasia de Mendoza y de pegar el gran golpe que el Mirasol necesita dar para meterse en la pelea por el torneo.