Un vecino de Isidro Casanova encontró dos alacranes en su casa

Lucas vive en el barrio Conet, de Isidro Casanova. En la madrugada del lunes, como cada noche, se levantó de su cama para ir a la cocina a buscar agua. Cuando abrió la puerta de la habitación, se encontró con “algo negro en el piso que se movía”. Rápidamente, prendió la luz y lo vio: era un escorpión.

“Tenía unos 50 milímetros más o menos, era grande. Me sorprendí porque nunca había visto uno. Sí sabía que son peligrosos”, contó a El1 Digital. “Me di vuelta, agarré una zapatilla y lo aplasté”, continuó. Al instante, el piso se llenó de un líquido verde que limpió por si tenía veneno. Para no tomar al insecto con la mano, con la ayuda de una escoba y una pala lo tiró en la basura.

A la mañana siguiente, al costado del sillón de su comedor descubrió otro alacrán “un poquito más chico”. “Pensé en atraparlo pero no tenía frasco, entonces, decidí aplastarlo como al anterior”, recordó. Luego de desecharlo, investigó si sus características eran las de la especie que tiene picadura mortal y, afortunadamente, no coincidían.

Más tarde, decidió hacer pública su historia en redes sociales para alertar a los vecinos. “Algunos compartieron la publicación y la gente fue sumando su testimonio. Me enteré que otros habían encontrado y en Moreno un chico fue picado y llevó el bicho al hospital para saber si era venenoso pero no lo era”.

Lucas sospecha que los bichos se colaron por debajo de la puerta de su casa. También, estima que pueden haber surgido de un basural que está detrás de su casa, donde un vecino junta chatarra, o del asfalto que están haciendo a media cuadra de su vivienda en el marco de las obras del Metrobus.

Alerta

Desde la Secretaría de Políticas Sanitarias Saludables de LaMatanza indicaron que es normal que este tipo de insectos aparezca en el veranoy aclararon que no hay una desinfección para evitarlos.