Belén Meccia, una vecina de Villa Luzuriaga tras la lengua de Shakespeare

El motivo del viaje fue perfeccionar su inglés. “Vine por un año, pero ya llevo cinco en la isla”, afirmó desde un pueblo llamado Cheltenham, en Inglaterra.

Belén Meccia es de Villa Luzuriaga, pero un día hizo las valijas y cruzó el Atlántico rumbo a Inglaterra para perfeccionar su inglés. Pasó por varios lugares y ahora nos habla desde Cheltenham, una ciudad pintoresca con playa situada en el condado de Gloucestershire, a tres horas en auto de Londres. Belén evitó radicarse en la capital del reino ya que “hay muchos argentinos” y ella buscaba convivir con ingleses de pura cepa para practicar el idioma. Pero con el tiempo se hizo de un grupo de compatriotas. “Compartimos asados y fernet”, le dijo a Radio Universidad. Y agregó que si se enteran que es de Argentina, enseguida sus interlocutores mencionan a “Maradona, la carne y el vino”, y a “Messi un poco menos”.

Enseguida aclara que mantiene ciertos rituales argentinos. “Tomo mate siempre y hasta cuando hablo por teléfono con mi mamá”, relató en relación a este rito que lleva a cabo para sentirse más cerca de su país natal, lugar que extraña al igual que a su familia, las mascotas, los amigos y la casa. “La Patria no se olvida”, afirmó y contó que muchos ingleses que conoce y viajaron a Argentina vuelven maravillados por “el estilo europeo de Buenos Aires”, entre otras cosas.

Malvinas, el Brexit y la guerra de Ucrania

Belén trabaja en un restaurante y tiene dos jefes nacidos en el país de “The Beatles”. El tema Malvinas apareció con motivo del aniversario cuarenta de la guerra. Para uno de sus superiores es insostenible que la corona británica tenga una colonia tan lejana, en los confines del mundo. En tanto, el otro se muestra a favor, pero no hay discusiones al respecto. “No es tema de pelea, queda ahí”, explicó la joven, ya que la cuestión Malvinas no está en comentario cotidiano de la población. “Para mí las Malvinas son argentinas. El dos de abril el primer ministro inglés ratificó la soberanía, pero la gente no le da mayor importancia”.

Con respecto a la guerra que sucede cerca, en Ucrania, Belén reveló que es el primer tema de los noticieros de radio y televisión. En tanto, en la vida cotidiana se ven algunas consecuencias como el faltante de alimentos. “No se consigue el aceite vegetal que venía de Ucrania, además de la preocupación por el suministro de gas que viene de Rusia”, describió. Otro tema que trae a cuento es el problema de los refugiados ucranianos. “Inglaterra es criticada por su demora para recibir a las personas”.

Belén también atravesó otro hecho histórico que fue la separación del Reino Unido de la Unión Europea. “El llamado Brexit era algo que estaba en el aire y no tenía base concreta. Tomó más peso hace dos años cuando se llevaron a cabo tratados para ver cómo salir de la mejor manera posible sin afectar al pueblo. Ya estamos afuera de la Unión Europea, pero no salió como hubieran querido. Yo tengo ciudadanía europea y no me afecta, pero los ingleses tienen limitaciones para ingresar a Europa continental”, detalló con la precisión de un cronista.

Despierta curiosidad saber cómo es la vida en un reino, bajo la tutela de Isabel II. Para Belén no hay diferencias porque “la monarquía es algo decorativo, turístico, que no tiene peso en la vida cotidiana”. Las decisiones pasan por los representantes elegidos por el pueblo. Claro, estamos hablando de monarquías constitucionales. “Todos vamos al palacio de Buckingham a sacarnos fotos y nada más”, dijo entre sonrisas la entrevistada.

Ya en el final de la charla, recordó su paso por la Universidad Nacional de La Matanza. “A la UNLaM la llevo en mi corazón. Ahí me recibí de Martillero Público. Si los pasillos hablaran contarían sobre la felicidad de los estudiantes que pasamos por ese lugar”, concluyó.