Reparos de los movimientos sociales al proyecto de Massa para transformar planes sociales en empleo

Los principales dirigentes territoriales de La Matanza cuestionaron que a la iniciativa girada al Congreso por el titular de la Cámara de Diputados le “falta discusión” y la consideraron más “una expresión de deseo que una realidad”. A su vez, pidieron “mayor amplitud y escala” en la generación de puestos de trabajo.

Los movimientos sociales con influencia en La Matanza salieron a cuestionar la presentación, por parte del titular de la Cámara de Diputados nacionales, Sergio Massa, del proyecto de ley denominado “Un puente al empleo”, que tiene como objetivo promover que las industrias empleen a beneficiarios de programas sociales y que esa asignación sea tomada como parte de sus salarios, para generar nuevos puestos de trabajo y, así, cumplir con una de las promesas del Frente de Todos para salir de la crisis. Así las cosas, los principales referentes manifestaron que a la iniciativa le falta debate y criticaron no haber sido consultados para la elaboración del documento que fue girado al Congreso.

En esa línea, el diputado nacional por el FdT y líder de la Corriente Clasista y Combativa (CCC), Juan Carlos Alderete, señaló, en declaraciones a El1 Digital, que, “hasta el momento, el proyecto es más una expresión de deseo que una realidad” y destacó que le falta “una discusión en la Comisión” del recinto deliberativo encargada de tratar esos temas. “Así como está, sería un beneficio para el que tiene un plan social ingresando a una empresa, siempre y cuando se los ponga en blanco, pero también se corre el riesgo de que sea contrato basura por tres meses”, advirtió.

En relación a aportes que podrían enriquecer aun más la propuesta, el dirigente nacional planteó que, entre otras cosas, “no se habla de capacitación”. “Creo que los obreros sociales tenemos que capacitarnos como obreros industriales y para ello debe intervenir la universidad tecnológica, para saber usar las nuevas tecnologías. No son los oficios de antes y debemos adaptarnos”, indicó, y precisó la necesidad de instruirse en áreas como la robótica, “que se usa para los distintos oficios en la industria”.

“Años anteriores, se hicieron experiencias y muchos pudieron ingresar ala Mercedes Benz, por ejemplo,en el caso de La Matanza. Fue con contrato, pero entraron previo un convenio con la UTN, por eso creo que debemos convenir con las escuelas fábricas. Ese es un plan integrador”, ejemplificó. A su vez, manifestó que “los mal llamados ‘planeros’ están trabajando por 13.000 pesos y con una contraparte que es trabajo en los comedores y merenderos”. “Pero en todo el país también tienen a los compañeros que cobrar 13.000 que ahora se va a 15.000 de programa social, pero está suplantando al trabajador social”, sumó.

Por su parte, la diputada bonaerense y referente del Movimiento Evita, Patricia “Colo” Cubría, consideró, en diálogo con este medio, que el titular de la Cámara baja nacional “hizo una propuesta para los medios, sin contenido”, y aseguró que “a veces se hacen propuestas muy alejadas de la realidad”. “Habla de herramientas que ya existen porque hoy todo el sector privado ya puede incorporar a trabajadores de la economía popular sin ningún tipo de impedimento”, aclaró, y recordó que, por gestión del FdT, “la CBU de cualquier compañera o compañero que cobra un salario social complementario puede ser utilizada por empleadores privados”.

En esa sintonía, también cuestionó el alcance del proyecto de Massa al asegurar que “no supera las 500.000 personas”, cuando son “millones y millones los trabajadores de la economía popular”. “Nosotros venimos planteando propuestas mucho más amplias que esa y lo que necesitamos como sector es que haya una escala mucho mayor en la producción y en la creación de trabajo, que hoy no existe”, aseveró, y pidió “no quedarse con lo poquito que se tiene, sino ir a más”.

“Creo que son dos desafíos diferentes. Es muy bueno distribuir de manera justa lo que tenemos, pero es mucho mejor si, además de eso, generamos más riqueza para distribuir aún más”, insistió. “Lo que planteamos desde el Ministerio de Desarrollo Social, desde la UTEP y desde todos los sectores involucrados es dignificar al sector con herramientas, materiales y con créditos no bancarios para darle un empujón como a cualquier PyME aportando lo que necesitan para seguir produciendo”, completó.

En tanto, José Oscari, referente local de SOMOS Barrios de Pie, se mostró en “total desacuerdo” con la iniciativa y pidió que “la política se sincere y deje de mentir”. “Es mentira que van a convertir planes sociales en empleo porque en la Argentina se fue año tras año perdiendo el trabajo y hoy no creo que alguien venga a poner una fábrica en ninguna parte del país para generar entre 2.000 y 5.000 puestos de trabajo”, cuestionó duramente. En ese sentido, remarcó que “los trabajadores que dependen de la economía popular son millones” y que “ya vienen desarrollando su trabajo desde hace tiempo”.

“Me parece que eso, más que nada, es un acting para la escena, pero que finalmente no va a suceder, porque nadie va a generar trabajo en este país teniendo la timba financiera como la salida más directa de crecimiento de poder adquisitivo para los sectores de poder”, criticó, y volvió a insistir en la amplitud de la medida. “Hoy, un empresario que ponga una fábrica, ¿cuántos empleados puede tomar? Entre 15 o 20 y, si esa fábrica quiebra, esos trabajadores vuelven a la desidia otra vez”, cuestionó.

En el marco del video de presentación de la iniciativa, Massa dijo que “una ley no es una solución mágica” y recordó que, “en 2002, la Argentina tenía más de un millón de plan Jefes y Jefas de Hogar” y que, para 2015, con el final de los gobiernos kirchneristas, habían quedado en “150.000” para pasar a “más de 700.000” en 2019, tras los cuatro años de gobierno macrista. “Tenemos el desafío de generar un puente de los planes sociales al empleo genuino”, planteó sobre el proyecto, que también recibió el aval de los intendentes bonaerenses, entre ellos, Fernando Espinoza.