San Justo: una vecina se resistió al robo de su auto a los bocinazos

Los delincuentes no pudieron sustraerle el vehículo, por lo que golpearon los vidrios, la insultaron y escaparon.

Una mujer se resistió al robo de su vehículo a los bocinazos en las inmediaciones de las calles Jujuy y Achala, en San Justo. Las cámaras de seguridad de la zona captaron cómo la mujer se encerró en su automóvil e impidió que los ladrones se lo sustrajeran a pesar de las agresiones verbales y golpes al rodado.  

En el registro fílmico se puede observar cómo la mujer se encontraba a bordo de su vehículo en la puerta de su domicilio cuando volvía de trabajar. En ese contexto, una camioneta frenó detrás de su rodado y un coche por delante. Tras darse cuenta de que estaba acorralada, decidió intentar frustrar el hecho para no perder su vehículo.

Del primer automóvil bajaron dos delincuentes armados y corrieron a la ventanilla de la conductora para exigirle que descendiera. Sin embargo, la vecina se encerró y comenzó a tocar la bocina para solicitar el auxilio de los frentistas de la zona. Incluso, intentó escapar hacia atrás pero chocó su coche. Ante esto, los ladrones comenzaron a insultarla y a golpear las ventanillas, pero sin éxito. 

Tras darse cuenta de que su objetivo delictivo se había frustrado, los sospechosos volvieron a los dos vehículos en los que arribaron al lugar y se dieron a la fuga. Rápidamente, los vecinos salieron de sus domicilios para socorrer a la mujer, que se encontraba en estado de shock por el miedo. 

Los últimos antecedentes en San Justo

Recientemente, integrantes del Departamento Casos Especiales de la Policía Bonaerense detuvieron a un hombre de 37 años acusado de liderar una banda de delincuentes. El arrestado es conocido por su alias “Pericote” y fue aprehendido en el barrio Almafuerte (ex Villa Palito) de la localidad de San Justo.

El sospechoso se encuentra acusado de cometer un robo bajo la modalidad de “escruche”. Este tipo de delitos consisten en ingresar a los domicilios forzando las entradas con la finalidad de desvalijar a sus dueños, cuando estos no están presentes en sus casas. En su caso, se trata de una vivienda en Morón a la que ingresó cuando los propietarios estaban de vacaciones.