Asalto al padre de Roberto Sabo: “El delincuente disparó para arriba”, reveló la pareja del kiosquero asesinado

Patricia, viuda de Roberto Sabo, contó detalles del violento suceso.

Otra vez el miedo, la inseguridad y la incertidumbre se apoderaron de la familia del kiosquero de Ramos Mejía Roberto Sabo, asesinado durante un asalto en noviembre de 2021. En esta oportunidad, el padre de Roberto fue quien padeció un hecho delictivo. “No se puede vivir más así”, sostiene la familia Sabo.

En diálogo con Radio Universidad, Patricia, viuda de Roberto Sabo, contó detalles del violento suceso ocurrido en el partido de Morón. “Querían hacer bajar del auto a mi suegro y, como no se podía sacar el cinturón, el delincuente disparó para arriba”, reveló. Y agregó: “Se llevaron el auto y luego lo recuperaron, pero el momento que se vivió el miércoles no fue nada lindo”.

En relación a la inseguridad en la zona, indicó que los asaltos son recurrentes pese a que ellos suelen tener vigilancia por el crimen de su marido. “En los alrededores, roban ruedas de auto, a los chicos del colegio... Esto sigue sucediendo después de lo de Roberto”, aseguró.

El crimen de Roberto

En noviembre de 2021, Roberto Sabo, de 45 años, fue sorprendido por dos delincuentes en su kiosco “Pato”, en Avenida de Mayo al 800, centro de Ramos Mejía. A punta de pistola, lo atacaron para robarle lo que estaba a su alcance y le dispararon.

Tras el violento hecho, se dieron a la fuga, aunque efectivos policiales lograron detenerlos a siete cuadras de distancia, entre la avenida Rivadavia y Belgrano.

Juicio al asesino

El 30 de agosto de 2022, el Tribunal en lo Criminal N° 2 de La Matanza sentenció a prisión perpetua a Leandro Suárez, de 29 años, por el crimen del kiosquero. Tanto el fiscal Sergio Alejandro Antín como los abogados de la familia de Sabo, Humberto Próspero y Juan Triverio, le habían solicitado al Tribunal N° 2 que Suárez recibiera la pena máxima.

En el violento ataque a Sabo también había actuado un menor que no fue juzgado en ese proceso judicial porque fue puesto a disposición de la Justicia de Menores al considerarse inimputable por su edad: tenía 15 años al momento del crimen.