Por qué la sequía fue eje de la reunión entre Alberto Fernández y Joe Biden

El analista internacional Jorge Castro se refirió a la relevancia de la sequía y sus efectos en la economía argentina en el encuentro que ambos mandatarios compartieron días atrás. Los números del fenómeno y cuál es la implicancia del FMI.

Por Jorge Castro*

Podés seguir leyendo...

Para Argentina, como país, Estados Unidos tiene una prioridad prácticamente absoluta, centrada en los efectos económicos y sociales que ha provocado la brutal sequía que el país tuvo en los últimos meses. La sequía ha provocado un daño que implica la liquidación de más de un tercio de las exportaciones del país, una cifra que son menos de 21.000 millones de dólares que va a recibir Argentina este año provenientes de sus exportaciones agroalimentarias.

Esto, a su vez, implica que el daño producido por la sequía implica la pérdida de entre cuatro y cinco puntos del Producto Bruto Interno, una auténtica catástrofe en el sentido descriptivo del término. Por lo tanto, Argentina necesita ayuda internacional para enfrentar esta situación que no tiene un carácter macroeconómico, es un episodio surgido por la naturaleza e imposible de prever.

Además, en este sentido, (Sergio) Massa tuvo una reunión con la secretaria del Tesoro norteamericano, Gita Gopinath, en la que planteó la necesidad de una ampliación del crédito que Argentina recibió del FMI que le permita enfrentar esta situación de carácter novedoso.

También te puede interesar...

Lo central de la reunión entre Alberto Fernández y Joe Biden estuvo centrado en el efecto catastrófico de la sequía en la economía del país, que ha creado nuevas condiciones que exigen una ayuda internacional. En el caso específico de los Estados Unidos, esta ayuda se manifiesta, sobre todo, a través de la acción del Fondo Monetario Internacional.

Creo que esta reunión con Argentina va en relación directa con la relevancia de este momento para la política exterior norteamericana, debido a que la prioridad absoluta de los intereses norteamericanos en América del Sur está centrada en Brasil. Tal es así que Lula Da Silva también ya fue invitado a Washington.

Por último, no creo que en la reunión se haya tocado el tema de la denuncia de Cristina Fernández sobre un senador norteamericano. Hay que dejar de lado, sobre todo en situaciones de crisis como ésta, todas las preocupaciones sobre la política doméstica, que carecen absolutamente de relevancia en términos internacionales.

*Analista internacional