La oposición logró la media sanción y el proyecto para frenar el tarifazo pasó al Senado

Con 133 votos favorables y 94 negativos, fue convalidada la iniciativa presentada por los bloques Argentina Federal y Frente Renovador que propone retrotraer el cuadro tarifario a los valores de noviembre de 2017 y atar las subas a los índices de variación salarial.

Como se preveía, la oposición, unida, logró darle media sanción al proyecto que busca limitar los incrementos en las tarifas. De este modo, la decisión queda en manos del Senado, que someterá a debate la iniciativa, según presuponen, a principios de junio. La votación, tras una larga jornada que se extendió hasta la medianoche, cerró con 133 votos positivos, 94 en contra y 3 abstenciones, del bloque liderado por Martín Lousteau.

Al proyecto original se le introdujeron modificaciones en el articulado. Por ejemplo, se establecerá un sistema de crédito a favor de los usuarios por el excedente cobrado por las prestadoras de servicios dentro de los 60 días posteriores a la puesta en vigencia de la ley. Por otra parte, se eliminó la quita del 50 por ciento del IVA en las boletas, medida que generaba mayor resistencia en el Gobierno por el costo fiscal que implicaría. Asimismo, se propone “duplicar los beneficios existentes al 1 de mayo de 2018 en los distintos regímenes de tarifa social.

Uno de los discursos más encendidos fue el de Graciela Camaño, del Frente Renovador, quien lanzó: “Queremos que quienes hoy votan, lo hagan sabiendo que atrás de todo este proceso de incremento de tarifas hay un tremendo negociado. Que nadie venga a decirnos que somos demagogos o que vamos atrás de tal o cual”.

“Si algo queda claro, es que este Congreso tiene la autoridad para proveer protección a los ciudadanos. El Congreso puede y le corresponde actuar, porque tiene la potestad constitucional para proteger los derechos de los usuarios. Lo que están haciendo es vergonzoso y los argentinos ya no toleran más tanta mentira”, agregó Camaño, quien, luego, advirtió que podrían ir a la Justicia en caso de que el Presidente vete la ley, tal como advirtieron desde Cambiemos.

En respuesta, el diputado oficialista Luciano Laspina planteó: “Los autores ideológicos del proyecto son los que nos llevaron a esta situación catastrófica. Los subsidios fueron un descontrol. Se nos quiso decir que era gratis cuando, en realidad, le costó miles de millones de dólares a los argentinos y a los más vulnerables”.

Pablo Kosiner, uno de los promotores del proyecto, señaló que con esta actitud empiezan a “romper la grieta en la Argentina”, marcando “otra manera de trabajar, que es discutir la agenda con firmeza, sin agraviar al otro ni desacreditar al que piensa distinto”.

Por su parte, Agustín Rossi cerró su alocución pronosticando un cambio de color político en el poder: “Quédense tranquilos los argentinos que las venas que están abriendo nosotros las vamos a cerrar en 2019”.

El último orador fue Mario Negri, quien responsabilizó al kirchnerismo por la crisis energética actual y planteó: “Si no hubiesen hecho todas esas cosas a lo mejor hoy no estábamos pensando en este problema y estábamos pensando en un futuro distinto”. “Más que discutir una solución alternativa al problema de tarifas, del que son responsables comprometiendo el cinco por ciento del PBI en subsidios, lo que están haciendo es producir un impacto fiscal que le suma 200 mil millones de pesos al déficit. Por eso, no vamos a acompañar semejante irracionalidad”, finalizó.