Duhalde, arrepentido, atribuyó sus polémicos dichos a "un desenganche de la realidad”

“No tenía que haber dicho lo que dije”, reconoció el expresidente sobre su advertencia de un posible golpe de Estado y alegó que sus declaraciones se debieron a “una repuesta vinculada con la pérdida momentánea de la mente, que se desengancha de la realidad”.

El expresidente Eduardo Duhalde admitió que “notendría que haber dicho” lo que manifestó días atrás sobre un posible escenario deruptura del orden democrático en el país, y tras ser cuestionado por todo elarco político, afirmó que sus declaraciones se debieron a “una repuesta vinculadacon la pérdida momentánea de la mente, que se desengancha de la realidad”, ydijo sentirse “tranquilo” luego de que políticos de varios partidos y el propioministro de Defensa, Agustín Rossi, descartaran toda posibilidad de un eventualgolpe de Estado.

En una nueva entrevista televisiva, Duhalde respondió a lascríticas que recibió de buena parte de la dirigencia política, organismos deDerechos Humanos y gremios por sus cuestionales dichos sobre la posibilidad de una rupturadel orden constitucional en el país. “He escuchado todas las repercusiones de mucha genteamiga. ¿Qué tiene que hacer un expresidente si una persona a la que tiene muchaconfianza le dice que están preparando un golpe de Estado”, se defendió de todos modos.

Cabe recordar que, el lunes, el también exgobernador bonaerense había planteado que “es ridículo que piensen que el año que viene va a haberelecciones" por la crisis desatada por la pandemia y ante el crecimiento de las tensiones entre oficialismo y oposición. "¿Por qué va a haber elecciones?”, se preguntó entonces y agregó que “entre 1930 y 1983, hubo catorce presidentes militares” en Argentina y que “quien ignore que el militarismo se estáponiendo nuevamente de pie en América, no conoce lo que está pasando”.

Puesto a explicar los motivos de sus declaraciones, el expresidente reveló que, al ser alertado por un “señordel Ejército” sobre la posibilidad de un golpe de Estado, se lo transmitióinmediatamente a la vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner, y luego alministro de Defensa, Agustín Rossi.

“Cuando me dicen eso, quise ubicarlo a Rossi, no lopude hacer, la llamo a Cristina, le digo 'pasa esto' y ella me dijo: ‘Andá, inmediatamente, a ver a Rossi'. El 18 de julio lo fui a ver. Le contéexactamente lo que yo conocía y me dijo: ‘Eduardo, estoy absolutamenteconvencido de que las Fuerzas Armadas están defendiendo el sistema democrático,pero voy a averiguar’”, contó Duhalde.

Sin embargo, alegó, "seguía con miedo".  "A diferencia de la mayoría, yo viví, -era intendente municipal de Lomas deZamora- el golpe de 1976 con un dramatismo extraordinario", planteó. Consultado luego sobre la identidad del militar que loalertó sobre una eventual ruptura del orden constitucional, el exgobernadorbonaerense se negó a revelar su nombre. “Dije lo que tenía que decir a quiencorresponde, que es a Rossi”, sostuvo.

“Yo no puedo contar qué le dije al ministro porrazones elementales. Imaginate que es un señor del Ejército, que hoy estáencubierto, es peronista y por eso tiene miedo de que haya un golpe”, insistió. Con todo, en otro tramo de la entrevista, Duhalde diosu versión acerca de por qué lanzó esa advertencia el lunes pasado en unprograma de televisión, lo que, dijo, preocupó “muchísimo” a su esposa, laexsenadora Hilda “Chiche” Duhalde y a sus hijas.

“Yo les contaba a mis hijas y, ahora a todos, quedesde hace muchos meses vengo hablando de un tema: que la pandemia (decoronavirus) produce actitudes psicóticas, un desenganche de la realidad y,nunca como ahora, ves gente que dice cosas que en su sano juicio no las diría”,señaló. “Quiero decirles a mis hijas que yo no estoy exentode tener esos temas psicóticos. A mí me puede pasar. Yo no me reconozcodiciendo lo que dije. No es un brote psicótico, es un instante, es undesenganche de la realidad. Es como un flash”, justificó.

“Como yo tengo pánico al golpe de Estado, después mepongo a pensar, veo el avance del militarismo en América Latina y me empieza adar más miedo. Eso evidentemente produce en mí ese efecto", explicó y, por último, admitió que “no tendría que haber dicho” lo que dijo en aquel programa e insistió en que fue “una repuesta vinculada con la pérdida momentánea de la mente, que se desengancha de la realidad”.