Infraestructura educativa, una deuda pendiente

Días atrás, durante la primera conferencia de prensa que tuvo como protagonista al gobernador electo Axel Kicillof hizo hincapié sobre el concepto de “tierra arrasada” para referirse a la situación en la cual se encuentra la Provincia. Prestó especial atención a la infraestructura escolar y a la sanitaria.

“Tierra arrasada”. Ese fue el término que utilizó Axel Kicillof para referirse al contexto provincial. En base a esto, puntualizó sobre la infraestructura escolar y la sanitaria. Desde el Consejo Escolar matancero, reconocieron la problemática.

Para Alejandro Schvartzman, presidente del Consejo Escolar matancero, desde el Municipio se hizo “muchísimo en un tema prioritario como es el de la infraestructura”. Y coincidió con las palabras de Kicillof: “En la provincia de Buenos Aires hay una falencia muy grande”.

El funcionario indicó que, en relación al ámbito local, se duplicaron los esfuerzos ante la falta de presencia de las autoridades bonaerenses. En los últimos tiempos se han hecho inversiones en más de 450 edificios escolares. “Tenemos más de 200 escuelas con aire (acondicionados) frío y calor en su interior”, al tiempo que reconoció: “Obviamente que faltan cosas por hacer, pero se hizo bastante”.

“Desde la Provincia habría que ver la forma de modificar algunas cuestiones. Por ejemplo: el hecho de que nos puedan proveer a las escuelas de un sistema de mantenimiento, porque por más obras que se hagan, si no se mantienen, a los tres años vuelven los problemas”, reflexionó.

En este sentido, propuso: “Habría que estudiar la forma de tener personal en la planta orgánica funcional de las escuelas, que sean obreros calificados como electricistas, gasistas y que estén en forma permanente en las escuelas con fondos específicos para el mantenimiento de las mismas”. “Con eso, la Provincia se ahorraría un montón de dinero”, cerró.