Cayó el último integrante de “la banda de los policías”: se escondía en una casa de Rafael Castillo

El exteniente Daniel Alfredo Inverardi se transformó en el séptimo imputado acusado de realizar secuestros extorsivos junto a otros cinco policías que trabajaban como él en el destacamento José Ingenieros, de Ciudad Evita, y un civil. Los otros seis detenidos ya fueron elevados a juicio oral.

Tras un año de investigación, efectivos de la Policía Federal Argentina (PFA) lograron desbaratar a una banda delictiva integrada por un grupo de policías y un civil que está acusada de realizar secuestros extorsivos con agentes del destacamento policial José Ingenieros, de la localidad de Ciudad Evita.

Según informaron fuentes judiciales, desde noviembre de 2020, buscaban al último integrante de la organización: un exteniente de la Policía de Buenos Aires, que pasó más de un año prófugo y, luego de diversas pesquisas, fue hallado en una vivienda de Rafael Castillo.

De acuerdo a lo precisado en la investigación, los uniformados están acusados de raptar y extorsionar a jóvenes a quienes le exigían dinero a cambio de no armarles causas penales y dejarlos detenidos en las dependencias policiales. 

En este último operativo, los agentes lograron detener a Daniel Alfredo Inverardi, de 26 años, que era el único de integrantes de la banda que no había podido ser arrestado en 2020 cuando agentes de la División Operativa Central de la Policía Federal Argentina (PFA) realizaron múltiples allanamientos. 

El último apresado es un exteniente de la fuerza provincial. Durante los operativos, secuestraron un revólver, municiones, chalecos refractarios, gorras de la Policía de la Provincia de Buenos Aires, celulares y otros elementos de interés para la causa.

El exteniente fue detenido en su vivienda de Rafael Castillo

Investigación

A partir del secuestro que denunció un grupo de jóvenes en 2020 se inició una investigación. En ese acto, las víctimas contaron que, a punta de pistola un comando policial los amenazó con armarles una causa penal y dejarlos detenidos si no reunían 300 mil pesos para el pago de un rescate.

 Tras reunir el dinero, familiares efectuaron el pago y los jóvenes fueron liberados. Al mes, otro nuevo hecho fue denunciado. Fue así que, ante este panorama, la Unidad Fiscal Especializada en Secuestros Extorsivos, a cargo de Marquevich, con las directivas del Juzgado Federal Nº2 de Morón de Jorge Ernesto Rodríguez, comenzaron a buscar los responsables y dieron con los implicados en el hecho.