"Te voy a matar": la nueva amenaza del acusado a la viuda del colectivero asesinado

El imputado Sergio Ariel Armoa volvió a increpar a la viuda de Federico Rivero en una nueva jornada del juicio oral.

"Te voy a matar, hija de puta", amenazó el imputado Sergio Ariel Armoa, de 37 años, a la viuda de Federico Rivero, el hombre asesinado en un intento de robo en 2020 en la localidad de Libertad, partido de Merlo.

La amenaza se produjo mientras el acusado era retirado de la sala de audiencias, segundos después de haber escuchado el pedido de la fiscal Graciela Biasotti de prisión perpetua para él y para Jonathan Acosta, de 27 años, alias "Jony", por el delito de "homicidio agravado".

Ya en la primera audiencia sucedió una situación similar cuando le gritó que la iba a matar a ella y a sus hijos luego que lo señalara como uno de los autores del crimen.

El abogado Hugo López Carribero, representante de Andrea Caballero, viuda del colectivero, coincidió con la representante del Ministerio Público en su alegato ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 5 de Morón.

En tanto, la defensa de Acosta solicitó la absolución y la de Armoa que sea encuadrado como un "homicidio en ocasión de robo" que estipula una pena de entre 10 a 25 años de cárcel.

Los jueces Marcos Javier Lisa, Julia De La Llana y Gabriel Sotelo pasaron a un cuarto intermedio para el viernes 13 de mayo a las 13 con la lectura del veredicto.

La viuda de Rivero ya había sido amenazada en la jornada anterior.

El caso

El crimen de Rivero ocurrió el 16 de junio del 2020, cerca de las 20, cuando el chofer fue con su mujer a hacer compras a un almacén del barrio.

Según el relato de la viuda, ambos se trasladaban en su Renault Sandero y se detuvieron en un comercio situado en Sucre, entre Esquiú y Finochietto, del barrio La Blanquita, donde ella bajó a comprar una gaseosa mientras su marido se quedó a bordo del auto en marcha.

En esas circunstancias, Rivero fue abordado por dos asaltantes que quisieron robarle, aunque se resistió e intentó bajar del rodado.

La mujer escuchó el disparo y, al regresar al vehículo, encontró a su marido caído hacia un costado, con medio cuerpo colgando hacia afuera, ya que los asaltantes intentaron sacarlo para llevarse el rodado.

La viuda llevó a su esposo herido hasta el hospital Eva Perón, aunque Rivero sufrió tres paros cardíacos cuando era intervenido y murió debido a la gravedad de la herida.