“Este es uno de los peores momentos de los últimos años”, aseguró Mario Ortiz

El secretario general de la CGT matancera y referente textil se refirió a la crisis industrial en el marco del aislamiento social y deseó “que la ayuda del Gobierno nacional sea importante para las empresas”, en particular, aquellas que no están pagando los sueldos completos.

El aislamiento social, preventivo y obligatorio generó consecuencias negativas en la economía que ya se hicieron palpables, como la ruptura en la cadena de pagos. Firmas como Garbarino y Minicuotas Ribeiro, por ejemplo, comenzaron a pagar sueldos en cuotas o, apenas, una parte de los mismos.

En diálogo con Radio Universidad, el secretario general de la CGT matancera y referente de los textiles, Mario Ortiz, se refirió a la dura situación y dio un diagnóstico tajante: “Este es uno de los peores momentos de los últimos años. Estos meses son terribles”.

“Hay empresas que ya no están pagando quincenas o que pagan solo el 50 por ciento del salario”, aseguró, por lo que vio con buenos ojos la asistencia del Gobierno nacional, que pagará la mitad de los honorarios de los trabajadores de las empresas privadas castigadas durante la cuarentena, con un tope de 33.750 pesos por empleado.

“Espero que la ayuda del Gobierno nacional a cobrar en abril sea importante para muchas empresas. Hay que dar una mano a las PyMEs y bienvenido sea que venga del lado del Estado”, expresó y subrayó que lo más importante “es que los compañeros no pierdan su trabajo y las PyMEs puedan seguir funcionando”.

Además, recordó que “en los cuatro años anteriores, la mayoría de las industrias perdió trabajadores y cerraron empresas”. “Cuando parecía que íbamos a tomar vuelo de nuevo, aparece esto (por el coronavirus y el aislamiento social), que tira abajo las perspectivas de avance”.

Por otro lado, Ortiz destacó que “hay que agilizar el tema de cinco o seis empresas textiles, que hay en La Matanza, que pueden producir barbijos y tela para las camas o los médicos”. “Además de ayudar, se activaría la fábrica. Se puede hacer sin que vayan todos los compañeros a trabajar, quizás 20 de cien”, concluyó.