Burnout, el síndrome que atenta contra las capacidades de trabajo

El psicólogo Giancarlo Quadrizzi analizó en Radio Universidad el llamado Síndrome del quemado, que hace referencia al estado de estrés y agotamiento del trabajador.

Por Giancarlo Quadrizzi*

En varios países de América se realizó un estudio que pone en relieve los síntomas: las personas llegan agotadas, cansadas, no tienen fuerza para encarar problemas y sienten que el trabajo que realizan no es eficaz. Y lo particular es que este análisis reveló que las personas reaccionan con cinismo ante todas estas premisas, que responden al denominado “Burnout” o “Síndrome del quemado”.

Las situaciones que necesitan de la empatía y de la capacidad de generar distanciamientos operacionales del problema se convierten en escenarios en los que el individuo actúa de manera cínica, dejando de considerar al otro como una persona con problemas que está pasando por una situación que uno tiene la responsabilidad de entender. Este problema, el “Burnout”, es muy frecuente en los ciudadanos, sobre todo en personas que trabajan en la atención de otras personas, como maestros de grado, médicos, psicólogos, trabajadores sociales, administrativos o recepcionistas.

El síndrome tiene como enfoque la salutogénesis, que tiene que ver con el origen de la salud, y tiene tres factores claves: tiene que haber cierta coherencia entre que uno pueda comprender el fenómeno ante el que uno se está enfrentando, este fenómeno tiene que poder ser manejable con los recursos que tengo y tiene que ser significativo.

Por eso, según Aaron Antonovsky, creador del término, que el trabajo sea significativo es la clave para que una persona sienta que merece recibir esa tarea y que la realice de manera eficiente y efectiva. Si una persona se acerca a una administración y se va sin una respuesta adecuada, volverá, pero con más trabajo. Las intervenciones son buenas, y hacen bien, o son malas: no son ni pueden ser inocuas.

La diferencia concreta que encontró el autor israelí-estadounidense fue cuando estudió el estrés postraumático de quienes habían ido a defender a su patria en la guerra y de los soldados que participaron en la guerra de Vietnam. Los primeros tenían traumas que podían enfrentar; los segundos no sabían por qué los tenían, y no por la gravedad del hecho, sino por su sentido.

*Psicólogo