Radiografía del voto matancero: el PJ avanzó fuerte en el primer cordón

Favorecida por la alianza de unidad, la cosecha del Frente de Todos creció a lo largo de todo el Distrito y terminó imponiéndose en todos los circuitos electorales en los que Cambiemos había logrado aventajarlo hace cuatro años, excepto en Ramos Mejía. A contramano, la cantidad de votos de Juntos por el Cambio cayó en 23 de los 25 circuitos matanceros.

En una victoria contundente que rememoró a los niveles de la histórica elección de 2011, cuando el peronismo obtuvo más del 60 por ciento de los votos y superó por más de 52 puntos a la segunda fuerza, La Matanza ratificó en las primarias del 11 de agosto su título de bastión casi inquebrantable para el peronismo.

Los votos del Distrito, con un total de 1.066.089 electores habilitados, de los cuales 788.877 acudieron a las urnas en este primer turno electoral, representan alrededor de un tres por ciento del padrón nacional y ayudaron, en parte, a la contundente victoria de Alberto Fernández por el Frente de Todos, quien, a nivel nacional, quedó a 15,5 puntos de ventaja del Presidente, Mauricio Macri, candidato de Juntos por el Cambio.

Esta vez, los guarismos fueron similares a los de 2011 en cuanto a la cosecha del peronismo, pero el nivel de polarización planteó un escenario distinto: la segunda fuerza quedó a menos puntos de distancia, pero el Frente de Todos se vio favorecido porque no había otra fuerza que pescara en sus mismas aguas, dado que los votos que sacaba el massismo, ahora, parecen haber fluctuado hacia la alianza de unidad.

En la categoría presidencial, el Frente de Todos obtuvo 62,64 por ciento de los votos en La Matanza, mientras que Juntos por el Cambio alcanzó 19,4 puntos. Axel Kicillof, en tanto, sumó 64,69 por ciento, frente al 22,38 por ciento de la Gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal. En cuanto a los candidatos a intendente, Fernando Espinoza logró 64,38 puntos y Alejandro Finocchiaro llegó al 21,87 por ciento.

Cabe aclarar que, en el caso de las categorías a gobernador y jefe comunal, los votos en blanco no son computados sobre la base total de electores, con lo cual el porcentaje cosechado por cada fuerza resulta superior. En la categoría presidencial, los votos en blanco son contados en las PASO, pero no así en la primera vuelta ni en el balotaje. De ahí que, si se mira por porcentaje, da la impresión de que hubo corte de boleta en desmedro de Fernández pero, en realidad, Espinoza consiguió 5.414 votos menos que él y 7.719 menos que Kicillof.

En detalle
Si se analiza el comportamiento del electorado matancero y se lo compara con las generales de 2015, cuando Cambiemos avanzó fuerte en el Distrito, el saldo es contundente y evidencia que el impacto de la crisis en el Conurbano bonaerense afectó con dureza la performance del oficialismo nacional. Tomando como referencia la categoría presidencial de la boleta –aunque la tendencia se repite en los otros tramos- de los seis circuitos electorales que se habían “pintado” de amarillo hace cuatro años, este 11 de agosto, Juntos por el Cambio logró mantener solo uno, el de la zona más céntrica de Ramos Mejía, aunque con una diferencia de votos menor: en 2015, había sido de 10.933 sufragios y, esta vez, fue de 3.730.

En cambio, el circuito de esa misma localidad que marca el límite entre La Matanza y Tres de Febrero, con la avenida Díaz Vélez como frontera, como así también los correspondientes a Villa Luzuriaga, Lomas del Mirador, San Justo y Ciudad Evita, le dieron la espalda a esa fuerza y se sumaron al resto del Distrito en su hegemonía peronista. Entre esos seis circuitos, Cambiemos había aventajado al Frente para la Victoria por 19.287 votos, mientras que el balance de este año, en esas mismas jurisdicciones, muestra que el PJ dio vuelta ese saldo y no solo descontó esa diferencia, sino que consiguió una ventaja de 5.158 sufragios en total.

Pero la contundencia de la victoria del peronismo no se explica, únicamente, por ese factor: con respecto a 2015, el PJ avanzó en los 25 circuitos electorales en que se divide el Distrito, mientras que Juntos por el Cambio sufrió una baja en todos, excepto en el sector más al sur de Virrey del Pino y en la localidad de 20 de Junio, aunque el crecimiento fue de solo 150 votos. De todos modos, en esas zonas, el Frente de Todos derrotó con contundencia a la alianza oficialista, por 76,9 a 10,1 por ciento y por 58,7 a 21,8 por ciento, respectivamente.

De manera inversa a la performance de Juntos por el Cambio, el Frente de Todos amplió significativamente su brecha en sus circuitos históricamente fuertes: los correspondientes al límite entre Rafael Castillo y Laferrere, en todo el núcleo centro de Laferrere y en González Catán, donde obtuvo victorias por más de 70 puntos.

Así, contando todos los votos del Distrito, Juntos por el Cambio perdió 30.260 votos con respecto a 2015, mientras que el peronismo ganó 102.239 en el mismo período. En consecuencia, la ventaja del PJ sobre la lista encabezada por el Presidente, Mauricio Macri, que había quedado en 197.714 votos en 2015, creció en el orden del 67 por ciento para terminar en 330.213 sufragios.