“Para bajar los femicidios, hay que desarmar el entramado de violencias”, insisten

Ante los nuevos casos de violencia de género y el femicidio de Karen Bustamante, la adolescente de 18 años asesinada en Moreno, desde el observatorio Ahora Que Sí Nos Ven mencionaron que, a pesar de que hay políticas públicas, los casos de femicidios no disminuyen, por lo que aumenta la preocupación.

En comunicación con El1 Digital, Julieta Delpech, abogada integrante de la organización, expresó: “Desde el Observatorio, que fue creado en el 2015, luego de la primera marcha de Ni Una Menos, que marcó un antes y un después en la visibilización de los femicidios en nuestro país, hacemos el registro que damos a conocer mensualmente, además del apartado anual que lanzamos a fin de año”.

“Lastimosamente, no hay variaciones en la cantidad de femicidios. Se entiende que, con dos femicidios por mes, estamos hablando de vidas de mujeres, y una al año ya es importante. No obstante, en los últimos seis años, las cifras se mantienen igual, si bien podemos ver que hubo cambios sustanciales en un montón de cuestiones de acceso a los derechos a las mujeres y diversidades. Con respecto al tronco duro de los femicidios, lo cierto es que las cifras no descienden. Está claro que, por más políticas públicas que se apliquen, los femicidios no desaparecen de un día para otro porque es la punta de un iceberg de un entramado de violencias que viene desde las primeras infancias, cuando somos criados para satisfacer, gustar y conformar al otro”, disparó Delpech.

Sumado a esto, sostuvo que hay muchos entramados de violencia de género en que el femicidio es la cúspide. “Para que los asesinatos de mujeres desciendan o desaparezcan, está claro que hay que desarmar el entramado de violencias en las que vivimos, y es un cambio histórico que requiere tiempo; obviamente, no deja de alarmar, preocupar y generar una situación de hartazgo que estemos hablando de una chica de 18 años asesinada en Moreno y dentro de una semana estaremos hablando de otra chica. Según nuestro último informe, hay un femicidio cada 36 horas”, indicó.

“En la última manifestación Ni Una Menos, uno de los principales reclamos fue una reforma feminista de la Justicia, porque está claro que hay algo que no está permitiendo llegar antes de que las mujeres sean asesinadas. Según nuestro informe, un once por ciento de las víctimas de femicidios tenía una medida de restricción y un 16 por ciento había realizado la denuncia, es decir, estamos hablando de vidas que llegaron a la Justicia, con todo lo que eso implica. Para una mujer que convive con un violento, radicar una denuncia es peligroso y un acto de mucha valentía. Hablamos de personas que hicieron los reclamos pero fueron asesinadas, porque hay una falla por parte de la Justicia y de las fuerzas policiales”, señaló.

Números que duelen

El 2 de agosto pasado, la ONG detalló en su último relevamiento que, desde el 1 de enero al 31 de julio del corriente año, se registraron 142 femicidios en el país, es decir, un asesinato cada 36 horas. El 68 por ciento de ese total fue cometido por las parejas y exparejas de las víctimas, y el 62 por ciento ocurrió en la vivienda de la víctima. Sumado a esto, 103 menores perdieron a sus madres como consecuencia de la violencia machista.