Néstor Gallego y las canciones para llegar a Dios

El sacerdote es el creador de un amplio repertorio de canciones religiosas que se cantan en la misas. En diálogo con Radio Universidad, afirmó que la música es una manera de llegar al corazón de las personas. Además, habló de la Semana Santa, la fe y los jóvenes.

El padre Néstor Gallego es sacerdote y capellán del Hogar de San José de la Montaña en Villa Devoto, en la ciudad de Buenos Aires. Pero también se destaca como autor y compositor de temas muy conocidos que integran el cancionero litúrgico de las misas. “Ustedes son mis amigos”, “En el nombre de Dios”, “Fiesta del Señor”, “Jesucristo danos de este pan” y “Madre de los peregrinos” son canciones que llevan  su impronta.

“La música es la primera expresión artística que ingresa a la percepción humana: entra al corazón y, con ella, todos los contenidos que se quieran compartir”, detalla el padre Gallego en diálogo con Radio Universidad.

El padre Néstor Gallego recibe un obsequio del Papa Francisco.

El sacerdote, de 70 años, siempre anda con la guitarra al hombro animando las clases de catequesis o los grupos parroquiales, entre otros. Su relación con la música viene del hogar familiar lleno de folclore, y se la toma con responsabilidad. Por eso siempre escribe, porque considera que “es la única manera” de aprender el oficio de la composición musical.

También el religioso participa en las redes sociales con sus canciones y considera que es una herramienta que hay que aprovechar para difundir el mensaje pastoral. “Es un paso necesario que demanda conocer los lenguajes nuevos”, afirmó del otro lado del celular, en plena Semana Santa.

Este período, la Semana Santa, es la máxima expresión de fe de los católicos, aunque en los últimos tiempos ese espíritu religioso haya cambiado. “En Europa cayó un poco el entusiasmo y Latinoamérica será el continente que a futuro deberá poner una inyección a la fe cristiana”, plantea el  sacerdote.

En ese sentido, Gallego cuenta que “los jóvenes buscan un modo de expresar la fe de manera distinta, buscan un lenguaje nuevo”. Por eso, Gallego celebra las herramientas tecnológicas, aunque pone límites. “Las redes ayudan pero no hay que confundir la realidad con una realidad virtual”, apuntó.

Consultado si  con la música se convirtió en “pescador de hombres”, como dice la canción,  Gallego aclara: El que pesca es Jesús, uno es un simple instrumento”.