Mansión Seré: un espacio para la Memoria y abierto a la comunidad hace ya 23 años

El predio de la Quinta Seré cuenta con once hectáreas donde también está el Polideportivo Gorki Grana.

Desde hace 23 años, este espacio que se encuentra en la localidad de Castelar, en el partido de Morón, que busca honrar la memoria de quienes fueron víctima del genocidio y el terrorismo de Estado, funciona y se relaciona con la comunidad, ya sea de los vecinos del Distrito como con aquellos que se acercan de otras comunidades para conocer el lugar.

“Desde el inicio fue una construcción colectiva de memoria, porque ya estaba abierto el polideportivo (Gorki Grana) y funcionaba también la Dirección de Deportes”, explicó Bibiana Gómez Cabrera, directora de Derechos Humanos de Morón, en comunicación con El1.

“Para los que no lo conocen, hay once hectáreas con cancha de fútbol y de hockey, una pileta para las colonias, pista de atletismo y mucho espacio verde para la recreación”, contó. En ese contexto, recordó: “Lo que sucedió fue que, mientras se realizaban las excavaciones de los arqueólogos y antropólogos, la comunidad se fue acercando y lo que fue impresionante es que empezaron a traer cosas que habían pertenecido a la casa original: pedacitos de baldosa, fragmentos de cerámica y de alguna reja”. 

Respecto de estos elementos, Cabrera explicó que se constituyeron en pruebas materiales para los juicios de lesa humanidad: “Además, son pruebas que ayudaron a los que estuvieron detenidos y detenidas en este centro clandestino a identificar el lugar, porque como todos sabemos estaban la mayor parte del tiempo tabicados; por ahí se podían correr un poquito la venda, pero todo lo que veían era un pedacito de suelo, un pedacito de una celosía o de una ventana”.

En lo que concierne a cuál es la recepción de la gente que visita el lugar, explicó: “En principio impartimos recorridas por el espacio a todas las escuelas, no solo del partido de Morón sino de partidos vecinos. Alrededor de 1.500 jóvenes hacen las recorridas por semana; también se trabaja sobre la identidad en la primera infancia con los jardines; con ellos no se hace el recorrido por el espacio, pero se leen los cuentos prohibido y sobre todo el tema de la identidad”.

Un espacio de Memoria

En el año 2000 se tomó la decisión política por impulso de la Asociación Seré por la Memoria y la Vida de realizar excavaciones para el descubrimiento de los cimientos del edificio donde funcionó la Mansión Seré. “De esta manera se pudo saber cómo eran las casas y se inició el proyecto arqueológico antropológico del descubrimiento de todos los cimientos”, recordó Cabrera. Así, este se convirtió en uno de los primeros espacios de memoria recuperada de toda Latinoamérica y fue declarado Sitio Histórico Nacional en 2013 por Cristina Fernández de Kirchner.

En ese contexto, explicó que el espacio funcionó como centro de detención clandestina entre 1977 y 1978, año en el que cuatro detenidos lograron fugarse: a partir de entoonces desmantelaron el lugar y a las personas que estaban detenidas las llevaron a otras dependencias para, posteriormente, dinamitar el espacio. ”Cuando se retiraron los militares, lo que quedó de lo que era la Mansión Seré es lo que se llama el casco, las paredes perimetrales; una vez que asumió el Gobierno democrático, se tomó la decisión de hacer un polideportivo, que es el que se conoce como Gorki Grana”, indicó.

En lo que respecta a la importancia de este lugar, Cabrera explicó: “El predio se constituye en un territorio de memorias porque siempre estuvo referenciado al centro clandestino de tortura, secuestro y exterminio o Mansión Seré frente a este, está en espacio de memoria por los pueblos originarios y también tenemos un mural que se llama Agua para los muertos, que lo realizó la red de artistas afrodescendientes del Oeste constituyéndose de esta manera en un territorio de memorias reconociendo a todos”.