Del cine a las calles de Ramos Mejía: un viaje a bordo del 'Rayito' McQueen

El1 recorrió la localidad matancera en el automóvil inspirado en el personaje de la película “Cars” y dialogó con su conductor Damián. “Cuando salgo con el 'rayito' a la calle, voy con buena energía y la gente toma esa frecuencia”, destacó.

McQueen no solo corre en pistas de carreras internacionales o en el ficticio pueblo desértico Radiador Springs, sino que, también, circula por las calles de Ramos Mejía. Es que, fuera de la pantalla, niños, adolescentes y adultos del Distrito pueden ver al popular auto deportivo de la película Cars (Disney) desplazarse por la localidad matancera. El1 viajó a bordo del vehículo y dialogó con su conductor Damián, apodado “El Colo”, sobre el origen del llamativo coche y las sorprendentes repercusiones en los vecinos de la zona.

“Alrededor de 20 coches de este tipo fueron importados, no sé para qué proyecto, que al final no prosperó. Entonces, quedaron en un depósito y fueron como remates. Algunos se llevaron a Santa Fe y otros quedaron en Buenos Aires. Yo compré tres hace dos años”, recordó el automovilista. Y, a continuación, describió: “Este Rayito McQueen tiene tres ruedas, acelerás como una moto y frenás como un auto. Toda la carrocería ya vino pintada y ploteada”.

“¡Qué lindo que es Ramos!”, tiene escrita la patente trasera del transporte. Su chófer siente un gran amor por la localidad, ya que nació, creció y trabaja allí. De hecho, rememoró cuando era niño y el Papa Juan Pablo II pasó con el Papamovil. En ese momento, él vendía en la calle fotos y banderas. Actualmente, conoce a muchos habitantes del lugar, por eso, mientras anda con su singular vehículo es saludado por numerosas personas.

“Una vez Nikola Tesla, el inventor de la electricidad, dijo que se basó en una fórmula que consistía en energía, frecuencia y vibración. Cuando yo salgo con el 'rayito' a la calle, voy con buena energía y la gente toma esa frecuencia. Algunos, ya sean chicos o grandes, vienen preocupados, y cuando ven el auto se les dibuja una sonrisa, ¡eso es impagable! Cuando uno transmite algo divertido, eso se refleja en la gente, y se dan cuenta que la vida es un juego. Se trata de divertirse, pasarla bien y disfrutar el momento. A los vecinos de Ramos Mejía, ¡gracias por tanto amor!”, valoró Damián.

Un personaje querido por chicos y grandes

El vecino ramense siempre tuvo vehículos extravagantes. Sin embargo, a la hora de elegir su automóvil de diversión y paseo, hubo algo especial que lo atrajo de McQueen. “Mentiría si dijese que fue exclusivo por la película. Me quedé con este porque trabajo en la calle y las plazas, me dedico al rubro de los pochoclos, los copos de nieve, entonces siempre tuve relación con el mundo de los chicos”, explicó.

No obstante, el público del singular transporte no se limita a las infancias. “Paso por cualquier lado. Lo paro en la puerta de un boliche a la noche y los pibes grandes se re divierten. O una vez pasé por una despedida de solteros, se subieron al auto y yo les sacaba fotos. ¡La gente se da cuenta que no hay edad para jugar!”, planteó.

Recorrido cinematográfico

La saga de Cars está conformada por tres filmes animados y, en todos ellos, el personaje protagonista es McQueen. En la primera parte (2006), el automóvil aspirante a campeón de carreras está a punto de conseguir el éxito hasta que, por error, toma un desvío inesperado en la polvorienta y solitaria Ruta 66 y queda aislado en el pueblo Radiador Springs.

En la segunda parte (2011), el Rayo y su amigo, la grúa Mate, viajan al extranjero para participar en el primer Campeonato Mundial en el que se decidirá cuál es el coche más rápido del planeta. En la tercera y última (2017), sorprendido por una nueva generación de corredores ultrarrápidos, el legendario McQueen queda relegado del deporte que ama, y para retomar su carrera, necesita la ayuda de la joven mecánica de carreras, Cruz Ramírez.