Crean humedales para contrarrestar la contaminación de antibióticos

Un grupo de investigación multidisciplinario estudia la eficacia de humedales construidos en la eliminación de antibióticos, utilizando plantas como herramienta de bioacumulación y depuración.

Investigadores del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) y de la Universidad Nacional del Litoral (UNL) llevan adelante un trabajo en el que analizan el potencial de los humedales construidos como una estrategia sostenible para gestionar y restaurar ecosistemas afectados, principalmente, por medicamentos.

En un primer estudio, se exploró la eficiencia de los humedales para la eliminación del enrofloxacina (ENR). Se trata de un antibiótico de amplio espectro utilizado en medicina veterinaria y presente en residuos de aves de corral y aguas residuales. Para ese caso, se utilizó la planta acuática Eichhornia crassipes como un medio para la bioacumulación y purificación del compuesto.

La investigación reveló que la enrofloxacina muestra una notable resistencia tanto a la degradación biótica como abiótica, persistiendo en el ambiente durante períodos prolongados. “Nos preocupaban los efectos perjudiciales de los compuestos presentes en los efluentes. Especialmente aquellos utilizados en la medicina veterinaria y la producción lechera, y su consecuente impacto ambiental”, sostuvo Carla Teglia, investigadora en el Laboratorio de Desarrollo Analítico y Quimiometría de la Facultad de Bioquímica y Ciencias Biológicas (FBCB).

Los resultados del trabajo sugieren que los humedales construidos del tipo de flujo superficial pueden desempeñar un papel crucial en la gestión de la contaminación por antibióticos del ambiente. Además, destacaron la importancia de seguir investigando. El objetivo es comprender mejor los mecanismos de bioacumulación y desintoxicación de estas plantas, así como su efecto en el crecimiento vegetal.

"El siguiente paso será analizar el tiempo que la planta tarda en purificarse a nivel orgánico y retornar a su estado inicial, con el objetivo de evitar más daños al medio ambiente. Al mismo tiempo, debemos considerar cómo escalamos este proceso y cómo podemos investigar otros contaminantes o compuestos fitosanitarios de interés”, adelantó.