Junto a otros intendentes peronistas, Magario insistió con el traspaso de la Policía Local a los municipios

Después de la “tregua” iniciada este miércoles con el ministro de Seguridad bonaerense, Cristian Ritondo, quien la recibió en La Plata, la intendenta Verónica Magario volvió insistir con el pedido para que el Gobierno bonaerense traspase el control de la Policía Local a los gobiernos comunales. La jefa comunal se había pronunciado en este sentido durante el cruce de acusaciones con el Ejecutivo provincial, tras el asesinato del chofer de la línea 620, Leandro Alcaraz.

En esta ocasión, Magario no fue la única que hizo este reclamo: en un acto realizado este mediodía, en el Anexo de la Cámara de Diputados bonaerense, otros intendentes peronistas, como Martín Insaurralde, de Lomas de Zamora; y Alberto Descalzo, de Ituzaingó, acompañaron ese pedido y presentaron, en conjunto, propuestas para mejorar la seguridad ciudadana en territorio bonaerense. Los jefes comunales fueron acompañados por legisladores, como el exintendente de Florencio Varela, Julio Pereyra, presidente del bloque PJ Unidad y Renovación.

“Lo que prima en nuestras ciudades, hoy, no es la seguridad. Por eso, tenemos que construir una política pública para trabajar en este tema porque la inseguridad ha crecido fuertemente. El delito es cada vez más alto, más feroz y está combinado con la droga, en un círculo en que la crisis económica que viven muchas familias complica más la situación”, expresó Magario durante la presentación del proyecto de ley, similar a uno ya impulsado en 2016, para que ese traspaso de mando quede reflejado en una normativa.

“Lo que necesitamos son dos cuestiones: que la responsabilidad que tiene la Provincia en seguridad la lleve a tomar una decisión y se trabaje junto a los intendentes. Por eso, apostamos a que se traspase la Policía Local a los municipios, pero ese debemos hacerlo con los recursos necesarios, los nuestros y los de la Provincia”, especificó con respecto a la propuesta puntual que formularon los intendentes.

En esa sintonía, Magario exigió que “crezca el número de policías y agentes de seguridad” en cada distrito. “Si seguimos teniendo la misma cantidad, no vamos a dar solución a este problema”, observó.

“Esto no es una cuestión del peronismo nada más, sino que es un problema que está pasando en los municipios de todos los colores políticos porque hay una realidad: hay menos policías. Esta desproporcionalidad frente al crecimiento de hechos delictivos genera que la situación se complique más”, continuó la intendenta, y recordó las responsabilidades financieras que han asumido los gobiernos distritales en cuanto al funcionamiento de la Policía Local.

“Hemos asumido muchísimas responsabilidades: pagamos el 90 o el cien por ciento del combustible de la Policía Local, los edificios donde funciona, su equipamiento. Lo único que no pagamos son los sueldos y lo único que no hacemos es tomar decisiones”, criticó.

“Esta es una preocupación de todos los vecinos, y es algo que pasa en todos los distritos. Cada intendente saca de su presupuesto un dinero importante que le quita a una obra pública para destinarlo a la seguridad: todos compramos patrulleros, motos, cámaras, botones antipánico para nuestros vecinos. Pero estamos afuera de las decisiones y no podemos explicarle a los vecinos que no tenemos decisión sobre la Policía Local porque depende de la Provincia”, coincidió Descalzo.

“No es una cuestión política, necesitamos ayudarnos todos juntos para resolver este problema. Queremos presupuesto y Policía Local para esa estrategia de seguridad que necesita la Provincia. No venimos a criticar, sino a proponer soluciones”, agregó el intendente de Ituzaingó.

A su turno, en tanto, Insaurralde recordó que, en marzo de 2017, la Gobernadora María Eugenia Vidal había anunciado la convocatoria a una mesa de trabajo multisectorial en materia de seguridad. “La desilusión fue muy rápida porque nunca fuimos convocados para discutir la cantidad de proyectos que hay en materia de seguridad, entonces creemos que tenemos que encontrar un norte y empezar a hacerlo. Queremos ayudar a que los vecinos vivan más seguros, pero si nos van a transferir los problemas de inseguridad, queremos que nos transfieran las responsabilidades y los recursos”, criticó.