Advierten que ascendieron a 20.000 las suspensiones, retiros y despidos en La Matanza

Son datos de la Secretaría de la Producción local, a partir de un relevamiento realizado en empresas, comercios y gremios del Distrito. Aseguran que, entre mayo y septiembre, cinco mil matanceros se sumaron a una situación de vulnerabilidad laboral.

Según un informe estadístico elaborado por la Secretaría de Producción de La Matanza, en lo que va del año, ya son 20 mil los trabajadores matanceros que sufrieron despidos, cesantías o aceptaron retiros, a raíz de la caída en la actividad productiva que generó falta de consumo y la merma en las ventas en distintos sectores. Eso significa que unos cinco mil matanceros entraron en una situación de vulnerabilidad laboral solo entre mayo y septiembre, dado que, a principios de mayo, de acuerdo al Ejecutivo comunal, eran 15 mil los vecinos en esta situación, como publicó El1 Digital en su edición 462.

En diálogo con este medio, el subsecretario de Políticas Productivas de La Matanza, Carlos Coma, precisó que el Ejecutivo llegó a esa cifra “a partir de los datos que se obtuvieron desde las distintas organizaciones gremiales del Distrito, además de las estadísticas brindadas por el sector empresarial y comercial”, y que, de ese total, “55 por ciento corresponde a suspensiones, un 30 por ciento a despidos y el 15 por ciento restante pertenecen a retiros” que los trabajadores terminan aceptando, aunque, luego, reinsertarse en el mercado laboral les resulte complejo.

El caso más emblemático en ese sentido es el de la siderúrgica Acindar, situada en La Tablada, que, de acuerdo a la UOM local, en agosto pasado, pasó a retiro a unos 50 trabajadores de “edad avanzada”. Estas estadísticas no incluyen a los trabajadores del sector informal pero cabe recordar que, a principios de septiembre, la intendenta, Verónica Magario, había advertido que, en el Distrito, se perdió “hasta casi un 40 por ciento del trabajo en negro”.

El escenario en La Matanza no escapa al contexto nacional: de acuerdo a la Encuesta de Indicadores Laborales del Ministerio de Trabajo nacional, solo la caída del empleo registrado fue de casi uno por ciento, lo que, de acuerdo al Sistema Integrado Previsional Argentino, que da cuenta de la cantidad de trabajadores en actividad, equivale a la pérdida de 134 mil puestos en el mercado formal.

Preocupación de los gremios

De acuerdo al relevamiento oficial, uno de los sectores más afectados a nivel local resultó ser el de la construcción, con 5.000 despidos acumulados en los primeros nueve meses del año, lo que representa un 25 por ciento del total, aunque, de acuerdo al secretario general de la UOCRA, Heraldo Cayuqueo, “por una leve reactivación de las obras públicas, se logró reincorporar a mil”.

Le siguen los rubros textiles y del calzado, afectados por la apertura no regulada de las importaciones y con un alto nivel de informalidad, y las industrias metalúrgicas y del plástico. En el caso de la UOM, por ejemplo, el titular del gremio, Hugo Melo, especificó que 1.150 trabajadores fueron suspendidos o se quedaron sin empleo.

Pero no solo los rubros de producción se vieron afectados por esta coyuntura. En el caso del comercio minorista, que acumula diez meses consecutivos en caída, el representante gremial de los trabajadores del sector en La Matanza, Ernesto Ludueña, aseguró que, en lo que va del año, “entre retiros forzados y despidos, se perdieron mil puestos de trabajo”. En tanto, desde Camioneros explicaron que 200 trabajadores fueron cesanteados en el Distrito y que, por un conflicto con OCA, peligran otras 1.300 fuentes laborales.

Los gremios, en primera persona

Mario Ortiz-CGT OFICIALISTA Y TEXTILES: “La mayoría de las empresas del Distrito tiene muy poca producción y se incrementaron las suspensiones. El trabajador que ha logrado mantener su fuente laboral ha perdido considerablemente su poder adquisitivo”.

Ernesto Ludueña-CGT DE LA UNIDAD Y COMERCIO: “No hubo despidos masivos, pero sí retiros forzados. En total, se perdieron unos mil puestos de trabajo. Además, sigue habiendo mucha informalidad”.

Ernesto Peralta-CALZADO: “El calzado es uno de los gremios, junto al textil, que más ha sufrido por la apertura al comercio exterior. Esto paralizó al gremio y desencadenó en suspensiones y desempleo”.

Hugo Melo-METALÚRGICOS: “En La Matanza, hay 800 compañeros suspendidos, unos 350 se quedaron sin empleo y, en otros casos, acordaron con los empresarios no ir a trabajar los días que las fábricas están cerradas por la caída en la producción”.

Heraldo Cayuqueo-CONSTRUCCIÓN: “En el Distrito teníamos 11.000 afiliados y pasamos a 7.000. Con la leve reactivación de las obras públicas, se incorporaron casi mil. Sin embargo, falta mucho para recuperar las fuentes laborales perdidas”.

Enrique Bracalenti-PLÁSTICO: “La producción cayó un 45 por ciento en el sector. Por eso, la mayoría de las PyMEs que tenían personal contratado optaron por no renovarlo. Además, se incrementó la cantidad de suspensiones”.

Daniel Paccord-PAPELEROS: “No se produjeron despidos masivos o suspensiones. Pero las horas extras de trabajo se interrumpieron abruptamente en todos los segmentos, a raíz de la baja demanda que también alcanzó a este sector productivo”.

Luis Velázquez-CAMIONEROS: “En la empresas radicadas en La Matanza se registraron suspensiones, pero muy pocos despidos. De 20.000 afiliados, perdimos solo 200. Pero peligran 1.300 puestos de OCA en dos sucursales locales”.