La UNLaM cumple 33 años de desarrollo académico y compromiso social

Fue creada por la ley 23.748, aprobada en el Senado el 29 de setiembre de 1989.

Con la apuesta siempre de pregonar el camino a la excelencia en su labor académica, extensionista y de investigación, este jueves 29 de septiembre la Universidad Nacional de La Matanza (UNLaM) celebra su 33° aniversario y, sin dudas, la comunidad universitaria, conformada por casi 60 mil estudiantes, docentes y no docentes, refleja su alegría, en el sentido de pertenencia en un campus modelo para la región y el país.

Con una oferta académica, deportiva y sociocultural abierta a toda la comunidad y con el flamante Cine-Teatro que exhibe los principales espectáculos musicales, conciertos, obras y films para que toda la comunidad disfrute de una sala de primer nivel, con la cultura y el arte en un espacio destacado en la Provincia de Buenos Aires.

No obstante, la historia señala el puntapié inicial en 1989 cuando el Senado de la Nación sancionó la ley de su creación, y así la Universidad Nacional de La Matanza se convirtiera en una oportunidad de desarrollo para las miles de familias que ven cómo sus hijos e hijas ingresan a las carreras y tras años de esfuerzo y estudio, pasan a ser profesionales con una sólida formación académica. La muestra más relevante la brindan los más de 20 mil egresados, que hoy son profesionales de primer nivel en distintas áreas del conocimiento y que, además, posiciona a la UNLaM como una de las Casas de Altos Estudios con el índice de graduación más alto del sistema educativo de la Argentina.

Con una oferta académica que supera las 60 carreras de grado, posgrado y formación continua, y una matrícula que, en más del 85 por ciento, son primera generación universitaria de la familia, la UNLaM resulta, en estos treinta y tres años, un ejemplo de eficiencia en la gestión y crecimiento institucional.

Pública, gratuita y de calidad, esta Casa de Altos Estudios cuenta con un centro de simulación clínica con ocho salas de atención médica que imitan la guardia de un hospital; más de 660 mil estudiantes que pasaron por sus aulas; un comedor universitario con 600 lugares; la Biblioteca Leopoldo Marechal, abierta a la comunidad, con más de 75 mil ejemplares y una capacidad para más de mil lectores simultáneos.

Además, este año la UNLaM pudo ampliar el edificio Pérez Esquivel en su segundo piso, que cuenta con dos auditorios, nuevas aulas y oficinas administrativas para el Departamento de Ingeniería e Investigaciones Tecnológicas.

Con un predio de 40 hectáreas ubicado en San Justo, localidad cabecera del Distrito, la UNLaM tiene en funcionamiento un Polo Tecnológico para el desarrollo de la industria del software, un campus deportivo con pista de atletismo, cancha de futbol, básquet, rugby, vóley playa, fútbol 5, piscina semiolímpica climatizada y un microestadio cubierto con capacidad para 800 espectadores, junto a un gimnasio que alberga a cientos de vecinos y a grandes figuras del deporte.

A su vez, la Universidad posee casi 200 aulas, cuatro auditorios y un aula magna; 35 laboratorios de informática y espacios de investigación, idiomas, electrónica, física y enfermería.