Ramos Mejía: es jubilada, vive en la calle y vende sahumerios para sobrevivir
Luego de encontrarla llorando, un joven compartió la historia de Graciela Espinel, quien transita “sola y asustada” los alrededores de Avenida de Mayo.
La solidaridad de un vecino de Ramos Mejía llegó hasta las redes sociales: a través de un grupo, compartió la historia de Graciela Teresa Espinel, una mujer de edad avanzada que vive en la calle, sola y asustada.
Ariel de Haro se encontraba en cercanías de la calle Belgrano al 100, en pleno centro de Ramos Mejía, cuando vio a Graciela llorando. “Me acerqué a preguntarle si necesitaba algo y me contó todo lo que le pasó”, narró el joven a El1. Según el relato, la mujer vivió una situación de extremo dolor: la golpearon, le robaron su jubilación, fue echada de la pieza que alquilaba porque el dinero no le alcanzaba y, como si eso fuera poco, también le sustrajeron su teléfono celular. Todo esto, de acuerdo con Ariel, está “corroborado por una denuncia” que ella misma tiene en su poder.
Incomunicada y en soledad, Graciela encontró un único remedio para sobrevivir en el día a día: la venta ambulante de sahumerios en Ramos Mejía. Así fue como Ariel dio con ella y compartió su historia a través de las redes. “Te parte el alma verla así. Si alguien puede pasar a darle una mano, entre todos podemos ayudarla en este momento horrible”, pidió.
Por miedo y desconfianza, la mujer no quiso dar datos personales al joven solidario. Sin embargo, Ariel señaló que Graciela se encuentra en cercanías de Avenida de Mayo y Belgrano, con la venta de sus sahumerios y a la espera de la buena predisposición de quienes quieran aportar cualquier tipo de ayuda.
“Lamento no haber podido darle algo más que un poco de dinero y colaborar con lo que pude. Subí la publicación para intentar ayudarla. Estaría bueno darle una mano más grande, pero a veces escapa de lo que uno puede hacer”, reconoció el vecino ramense.