Políticas públicas de reducción de daños: qué son y cómo deben aplicarse

Especialistas insisten en la necesidad de crear buenos hábitos para evitar caer en consumos problemáticos. Además, enfatizan el hecho de contextualizar los mensajes que se dan a través de los medios de comunicación.

Es importante destacar que las políticas de reducción de daños surgieron hace ya varias décadas y, de hecho, comenzaron a desarrollarse en el norte de Europa en la década de los ´80s. Esto se dio ante el fracaso de los programas denominados “Libres de Drogas” y, especialmente, en relación con el consumo de heroína por vía parenteral. Los especialistas sostienen que una manera de mitigar la propagación de los consumos problemáticos de sustancias es evitando dar mensajes en un contexto erróneo.

Pero ¿a qué se denomina políticas de reducción de daños? Se considera que son estrategias tanto individuales como colectivas destinadas a minimizar los daños que se encuentran asociados a una determinada circunstancia. De esta manera, se puede especificar que, en el espacio de las drogas, esas estrategias pretenden minimizar los daños asociados al consumo sin necesariamente reducirlo o eliminarlo.

“Lo primero que hay que tener en cuenta es que hay información que es fundamental y que es importante que todos sepamos, lo que se denominaría información general y que está bien que todas las personas la tengan”, explicó el psicólogo social Giancarlo Quadrizzi en diálogo con Radio Universidad. Y añadió: “Si profundizo en los detalles, lo que hago es meter a la persona en un problema que no estaba ahí. Hay que saber quién es el receptor del mensaje, pero, como toda estrategia, tiene su riesgo”.

“Si yo le digo a alguien que no tiene contacto con las sustancias ‘Andá de a poco’, le estoy dando un mensaje que no tenía en la cabeza y lo estoy introduciendo en un problema que quizás no se lo iba a plantear nunca porque no estaba en contacto con las sustancias, es decir, que no tenía consumos problemáticos y yo lo estoy metiendo en un problema que no tiene”, explicó el especialista.

La importancia de dar un mensaje en el momento y lugar indicados

Para dimensionar cuán importante es el contexto en este tipo de situaciones, Quadrizzi explicó: “Si descontextualizo un mensaje, lo expongo en los medios y me pongo a hablar de sustancias, estamos ante el mismo problema que cuando se plantea una situación de suicidio donde cualquier movimiento que hagan los medios de comunicación, por ejemplo, puede generar réplicas”.  

En ese sentido, el psicólogo también indicó que las adicciones a las sustancias son patologías que afectan a un porcentaje muy pequeño de las personas que consumen: “La mayoría de ellas no están implicadas en consumos problemáticos”.

Los buenos hábitos

Para evitar caer o profundizar los consumos problemáticos, el especialista insistió en que hay que trabajar en prácticas más sanas: “Con las personas que no tienen problemas de consumos, debemos generar estrategias de hábitos saludables y, con quienes ya los tienen, tenemos que lograr que ese consumo sea lo menos nocivo posible.; eso es la reducción del daño”.

“Es importante que se puedan generar campañas de promoción de hábitos saludables y es necesario remarcar que en la actualidad no las hay”, expresó Quadrizzi. “No deben ser solo campañas, sino que han de asegurar, por ejemplo, que la actividad física que se promueve sea realizable sin tanto problema”, resaltó.