Lo personal es prohibido: ¿imposición política en los jóvenes o educación?

El psicólogo Giancarlo Quadrizzi analizó al aire de Radio Universidad las modificaciones a la ley 26.061 y las acusaciones de “adoctrinamiento” por parte de docentes en las aulas.

Por Giancarlo Quadrizzi*

Por decreto del Poder Ejecutivo Nacional (PEN), se modificó la ley 26.061 de Protección Integral de Niños, Niñas, Adolescentes y Jóvenes sobre un tema que es bastante sensible. Parte del decreto establece que la imposición de una manera de pensar y/o actuar político-partidaria en el ámbito educativo, vulnera el derecho a la libertad de los niños y adolescentes.

Se supone que esto parte de los derechos reconocidos por la Convención sobre los Derechos del Niño e incorporados en nuestra Constitución Nacional. Me parece que es grave imponer una mirada político-partidaria en una mirada limpia y abstracta. Pero, en esta realidad actual donde se acusa de adoctrinar y se dice que las universidades son centros de adoctrinamiento marxista, lo que es claramente una falacia, es preocupante.

El riesgo está en la modificación de lo establecido; por eso, en este decreto se habla de cualquier cosa que tienda a politizar los problemas cotidianos, que es lo que nosotros entendemos que hay que hacer. Ante esta situación de persecución, y en un año electoral como el que se viene, a lo que más le temo es a la autocensura, a la cantidad de personas que seguramente puedan decir: ¿voy a hablar de educación sexual integral o van a considerar que esto es adoctrinamiento?

Aquí, la gravedad del asunto es saber qué discursos serán tomados como discursos político-partidarios y de qué manera se pensará si hay una imposición o no. De qué manera se protegerán esos derechos, como por ejemplo el de la libertad.

La educación como factor de desarrollo de habilidades

En las sociedades de salud y adolescencias que existen a nivel nacional e internacional, se habla de habilidades para la vida para romper ese esquema de que los adolescentes son personas que solo tienen problemas de consumo o de sexualidad. Entonces, se trabaja en el desarrollo de esas habilidades emocionales, cognitivas y sociales.

En base a toda esa experiencia, es muy importante incorporar las habilidades políticas, entender de qué manera uno socialmente puede agruparse, llevar adelante algunas acciones de tipo político, que va desde la conducta del voto a conductas previas, por ejemplo, tener conocimiento de cómo está conformado el sistema político.

Si medimos el conocimiento de estas personas como actores válidos en la transformación social y la voluntad personal que tienen de participar en esta contienda, todos esos discursos, necesariamente, deberán tener ribetes políticos que, en algunos casos, serán partidarios o no. En todo caso, lo que se debe cuidar es que no haya una imposición.

*Licenciado en Psicología (MP 81.769).