Lactancia materna: la práctica que las beneficia tanto a ellas como a los bebés

Según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la lactancia materna es la forma óptima de alimentar a los bebés ya que proporciona los nutrientes que necesitan de forma equilibrada mientras que, al mismo tiempo, los protege frente a la morbilidad y la mortalidad debido a enfermedades infecciosas. Además, reduce el riesgo de que las madres desarrollen cáncer de mama, de ovario, hipertensión y enfermedades cardiovasculares.

Según la Guadalupe Mangialavori, licenciada y docente de la carrera de Nutrición de esta Casa de Altos Estudios, aseguró que la leche materna “es el primer alimento saludable”. “No solo tiene todos los nutrientes que el bebé necesita, sino que se va adaptando según va creciendo y los protege mucho. Por eso decimos que los bebés que son amamantados siempre son mucho más sanos y tienen menores riesgos de enfermedades”, explicó en comunicación con Radio Universidad.

Además, Mangialavori desmintió que el abandono de la lactancia se produce porque el bebé “se queda con hambre”. “No es así. Cuando una madre amamanta a su bebé se producen dos etapas: en la primera, se hidrata al niño y se sacia su sed, mientras que en la segunda, que es más rica en nutrientes, se lo alimenta. Es muy importante dejar que el bebé termine de comer y no interrumpir el proceso”, indicó.

Asimismo, la especialista señaló que “no hay una fecha de vencimiento definida” para dar por finalizada la lactancia materna, ya que “no hay evidencia” de que sea riesgosa si se la prolonga en el tiempo. Sin embargo, recomendó que “hasta los dos o tres años”, se continúe ya que protege al bebé: “Luego de este tiempo, es una decisión privada si se mantiene la lactancia o no, depende de los deseos de la madre y del bebé”.

Por último, Mangialavori destacó que, en Argentina, la lactancia “es muy valorada” y que “casi el 97 por ciento” de los bebés la inician en algún momento. “Estamos muy bien posicionados y es maravilloso porque, hasta el sexto mes cumplido, el bebé no necesita ningún otro alimento. No obstante, sí hay que reconocer que mantener la lactancia es más difícil: a nivel nacional, solo el 44 por ciento continúa esta práctica”, alertó.