Cuestionan la frecuencia del transporte público de colectivos: “Se necesitarían más subsidios para agregar servicios”

Desde la empresa Nisa, destacaron que la cantidad de pasajeros en La Matanza creció mucho durante los últimos años y que, por eso, se debería aumentar el número de coches. Pero solo se podría hacer con más subsidios estatales.

Desde la empresa de transporte Nisa, que nuclea a las líneas de colectivos 620 y 382, indicaron que la resolución 422 del Ministerio de Transporte, de 2012, impide que se agreguen más servicios ya que, si se sumaran unidades, el costo que habría que pagar sería mayor. Asimismo, apuntaron que en La Matanza hubo un gran aumento demográfico en los últimos años que se ve reflejado en que los coches no dan abasto para transportar a los pasajeros.

En referencia a las quejas de los usuarios que se vienen registrando en varios lugares del Distrito por la frecuencia horaria de los colectivos, el vicepresidente de la empresa NISA, Gustavo Castiñeira, indicó en diálogo con El1 Digital: “En realidad, son muchos los factores que intervienen: primero está el tema del tráfico, que sin dudas cambió mucho junto con la sincronización de los semáforos, sumado a la resolución 422 que viene de la época de (Florencio) Randazzo como ministro de Interior y transporte”. “Esta habla de determinada cantidad de unidades en el AMBA y, por el hecho del subsidio, no se pueden incorporar más colectivos”, añadió.

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En ese sentido, remarcó algo que ya habían destacado desde otras empresas de transporte público: en estos últimos diez años, el partido de La Matanza tuvo un alto crecimiento demográfico. “Los servicios están acotados por esa misma resolución (en referencia a la 422), que viene de 2012 y por eso no se pueden agregar más unidades al sector”, explicó.

Castiñeira también dijo que tal resolución establece que, si se suman unidades, se tendría que acrecentar el nivel de subsidios. “Hoy, el transporte de pasajeros está subsidiado en un 90 por ciento”, aseguró. A la vez, explicó: “Esta medida impide dar mayor frecuencia porque, quizás, con el tránsito y con todo lo que tenemos demográficamente en cuanto a mayor cantidad de pasajeros, necesitaríamos más cantidad de unidades y hoy no podemos darla porque el subsidio está acotado a un sistema de costos por determinados kilómetros: al agregar unidades, nos estaríamos pasando del costo, lo que es imposible de afrontar”.

El precio del pasaje

El vicepresidente de Nisa sostuvo que es imposible que las empresas de transporte sobrevivan sin subsidios, porque representan el 90 por ciento de los ingresos. “Hoy, con el boleto solo, no pagamos ni el gasoil”, recalcó. En ese sentido, aseguró: “El boleto promedio de una empresa de La Matanza como la nuestra es de 13,50 pesos porque tenemos el pasaje con asignaciones sociales, que está a 9 pesos, y, hoy, el promedio debería estar por encima de los 150 pesos”.

En lo que respecta a una posible solución al tema de la frecuencia de los servicios, planteó: “Considero que habría que modificar la resolución 422, realizar un estudio que permita saber cuántos pasajeros hay por kilómetro, en cada zona, para saber cuántas unidades habría que tener y, así, ver cuánto dinero le corresponde a cada coche”.

Aumento del boleto

“Probablemente, en agosto haya un aumento de un poco más del 40 por ciento en el pasaje, pero eso no significa nada: hoy, hacer rentable una empresa es algo complicado porque la producción en nuestro caso sería el transporte de pasajeros, pero, además, dependemos de la resolución que tengamos en el Ministerio de Transporte”, expuso Castiñeira. “Para que la gente viaje mejor, por lo menos necesitaría incorporar de 25 a 30 unidades, pero es imposible por las razones que ya hablamos; esto, lamentablemente, favorece la proliferación de los denominados truchos y, de alguna manera, es comprensible porque la gente necesita viajar”, reconoció.

En ese contexto, explicó que la empresa cuenta con 204 unidades y que necesitaría más “porque La Matanza no para de crecer poblacionalmente, a lo que hay que sumarle el ausentismo del personal”. “A pesar de todas esas dificultades, estamos dando el 95 por ciento del servicio todos los días”, destacó.

En lo que respecta al Metrobus, indicó: “Ayudó, pero en La Matanza hay tantos semáforos sumados que la velocidad comercial también varió mucho; habría que hacer un trabajo más profundo con el aumento de carriles exclusivos para nosotros, sobre todo, en San Justo y Ramos Mejía”. Y finalizó: “De todas maneras, aunque se quisiera, llevar el boleto al costo real sería imposible porque, hoy, la población no lo podría afrontar”.