Estela Díaz: “Donde hay una necesidad, debe recomponerse un derecho”
La ministra de las Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual de la provincia de Buenos Aires analizó el 25N y las jornadas que se desarrollan en la ciudad de Mar del Plata, con la participación de más de cien municipios.
En comunicación con Radio Universidad, la ministra de las Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual de la provincia de Buenos Aires, Estela Díaz, analizó este 25N y las jornadas que se desarrollan en la ciudad de Mar del Plata, con la participación de más de cien municipios bonaerenses, áreas de género, equipos interdisciplinarios, universidades y organizaciones sociales.
“La violencia por razones de género es una problemática muy generalizada, y en el encuentro hay personas que dedican su vida trabajando para prevenir, atender, acompañar y asistir. Para quienes están todo el tiempo trabajando en problemáticas tan complejas y, a veces, difíciles de abordar, estos espacios de encuentro son como una bocanada de aire debido al intercambio generado”, destacó.
En este contexto, Díaz se refirió a las críticas que recibe la inversión pública en esta materia. “Se acaban de construir por primera vez ministerios de mujeres a nivel nacional y provincial, jerarquizando el área a través de secretarías de Estado, por lo cual aquí cabe preguntarse por qué se cuestiona tan rápidamente un nivel de gestión. Incluso, a veces me da la sensación de que la gente cree que las transformaciones y los cambios sociales se dan por arte de magia”, expresó.
Asimismo, sostuvo que los políticos asociados con el liberalismo cuestionan las carteras de género porque “quieren un Estado mínimo para el negocio de unos pocos privilegiados y, para el resto, un Estado empobrecido sin ningún beneficio para aquellos que no tienen acceso”. “Ellos privilegian pegarle a la política feminista, pero yo me llamaría a la reflexión cuando eso viene del campo nacional y popular”, agregó.
En esta línea, Díaz considero que “todavía hay una cultura machista que recorre todos los campos ideológicos” y, para trabajar la problemática, “se trata de colocar las políticas de género en el principal lugar de gestión”. “Pensamos que el Estado es reparador, promotor y redistribuidor: allí donde hay necesidades, desigualdades e injusticias, deben reponerse derechos”, planteó.
El género, en la institucionalidad estatal
De acuerdo a la ministra, 80 municipios de la provincia de Buenos Aires crearon o rejerarquizaron áreas de género durante 2022 con el fin de construir más institucionalidad estatal en la materia con el antecedente del feminismo, las organizaciones y los movimientos sociales de quienes han puesto en agenda la temática. “Todos ellos, principalmente el feminismo, han logrado una gran masividad y efectividad política de poder interpelar en cuanto a las decisiones de gestión que hagan una fuerte inversión en la materia”, comentó.
En este sentido, destacó que desde el Ministerio de Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual bonaerense, junto al Ministerio de Hacienda y al propio Gobernador, Axel Kicillof, presentaron el primer sistema de indicadores con perspectiva de género en la Provincia. “Es un esfuerzo de sistematización de datos en cinco dimensiones: económica, sanitaria, de violencia, de toma de decisiones y de políticas de Estado. Era mucha información que estaba dispersa y esto se hace para poder ponderar cómo está la situación”, reveló.
Herramientas de capacitación
Por último, Díaz se refirió a Ley Micaela, la capacitación obligatoria en género y violencia de género para todas las personas que se desempeñan en la función pública nacional en los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial y que, además, fue requerida para todo el personal docente y no docente de esta Casa de Altos Estudios.
“Es una herramienta fantástica que plantea la obligación de formarse en perspectiva de género contra las violencias, lo cual promueve cambios institucionales. Desde el Ministerio la estamos implementando y, además, estamos con la estrategia de formadores para que cada ministerio u organismo tenga su unidad responsable de la implementación. Al respecto se producen experiencias fantásticas y se construye una institucionalidad más receptiva desde lo humano y la diversidad de las personas, para alentar a una mayor escucha”, cerró.
