Alumnos de sexto año celebraron su “UPD” en Ramos Mejía

A diferencia de otros años, cuando primó el descontrol y la violencia, el último primer día (UPD) de alumnos de la localidad de Ramos Mejía se realizó en un contexto de celebración y alegría. Acompañados por sus padres, estudiantes de sexto año del Colegio Parroquial Juan XXIII comenzaron un nuevo ciclo lectivo, el último de la escuela secundaria, eufóricos, con música y bombos.

En este clima de festejos, madres de los estudiantes destacaron el trabajo realizado para que esta fecha tan especial quede para el recuerdo. “En septiembre del año pasado comenzamos a planificar este día en conjunto con los chicos. Primero se había barajado la posibilidad de celebrar el UPD en una quinta, pero la idea no nos convencía porque no iba a haber mucha seguridad ni control sobre ellos”, indicó una madre a Radio Universidad.

En cambio, y ante el recuerdo de festejos previos marcados por los excesos, se optó por celebrar en un boliche de la zona. “Nos gustó más porque los chicos no iban a poder comprar alcohol y desde el espacio les brindaban comidas”, explicó la mamá. En este ambiente controlado pero seguro, tanto egresados como padres llegaron a un acuerdo.

Luego de la fiesta, los estudiantes asistieron a clases con normalidad, acompañados en su UPD por los adultos. “Vinimos para recordar este día con ellos. Antes, los últimos primeros días eran un descontrol y nosotros no sabíamos bien qué hacer y pensábamos que invadíamos. Ahora, entendemos que tenemos que estar y controlar que ellos estén bien”, destacó la madre.

Como resultado, las seis divisiones de sexto año de la institución ramense llegaron en perfectas condiciones a las aulas. “No hubo ningún chico alcoholizado. Ojalá que esto empiece a ser así, más organizado y controlado”, ponderó otra madre.