Angustiada, una vecina pide que le devuelvan su perro robado en Villa Luzuriaga

Desde el 18 de julio, la vida de Silvia, una jubilada que vive en el vecino distrito de Morón, dio un vuelco con una gran dosis de tristeza y angustia. Ese día, un motociclista le robó el bolso en el cual viajaba Tommy, un pequeño perro de raza yorkshire, su compañero de todos los días.

Silvia iba a retirar, en bicicleta, una prótesis a Villa Luzuriaga, con Tommy en su bolso, en el canasto delantero del rodado. La acompañaban, también en bicicleta, su nieta y su nuera, que nada pudieron hacer para detener al sujeto que, a bordo de una moto color negra, se ubicó junto al canasto y de un manotazo se llevó a Tommy.

Desesperada, Silvia ofrece una recompensa para quien se lo regrese. “Tommy es un perrito mini Yorkshire, porque pesa 2 kilos con 300 gramos. Nació el 23 de diciembre del 2019 y estuvo siempre conmigo. Desde que me jubilé ha sido mi compañero. Dormía conmigo, hacía los mandados conmigo. Siempre íbamos juntos a todos lados. Tommy tiene color beige con la cabecita más blanca y el lomito gris. Tiene un problema en el hígado. Toma un medicamento, un protector para el hígado, que se llama Trihepat”, contó.

“El día 18 de julio tenía que ir a retirar una prótesis a Villa Luzuriaga. Vivo en Morón. El día estaba lindo. Mi nieta estaba de vacaciones, así que mi nuera, mi nieta y yo decidimos ir en bicicleta. Mi bicicleta tiene un canasto adelante, donde yo ponía el bolsito con Tommy. Siempre viajábamos así”, recordó.

“Eran las dos de la tarde, íbamos por la calle Garibaldi. Cuando llegamos casi a la esquina de la calle Atenas, vi la moto al lado mío. Esta persona estiró el brazo, pegó el manotazo y me agarró el bolsito que yo tenía en el canasto de la bicicleta. Supongo que pensaba que tenía dinero, cosas por el estilo. Pero adentro estaba Tommy”, lamentó Silvia.

La búsqueda

Desesperada, Silvia intentó correr tras la moto a pesar de su edad, de su salud y de que sabía que era casi imposible que la alcanzara. Pero corrió igual. “En ese momento quise correrlo pero, obviamente, él estaba en una moto grandota. Lo quise correr, me caí y levanté varias veces, pero obviamente no lo iba a alcanzar”, contó.

“En ese momento perdí el conocimiento, se me aflojó todo el cuerpo. No me podía levantar, me caí. Esta persona siguió por la calle Garibaldi y pensamos que cruzó Cristianía hacia el otro lado”, recordó.

Ya pasaron más de dos semanas desde el robo de Tommy. Silvia continúa la búsqueda. “La denuncia está hecha en la comisaría de Los Pinos. He hecho carteles en las paradas de colectivos, en San Justo, en Morón, en Cristianía, cerca de donde pensamos que cruzó esta persona. También en la calle Garibaldi. Creo que cámaras municipales no hay allí por lo que vi. Solamente hay cámaras en una fábrica de panificados y un supermercado en Garibaldi y Cristianía. A los dos les pedí dos veces las filmaciones de las cámaras, y siempre me las negaron”, lamentó.

“Quiera Dios que podamos encontrar pronto a Tommy. Se hace muy difícil el día a día sin él, porque dormía conmigo, estábamos todo el tiempo juntos. No había momento en el cual no estemos juntos. Y de repente, que me lo arranquen así... han sido días muy difíciles. Porque yo también estoy enferma, tengo arritmia, insuficiencia mitral, estoy medicada. Si alguien me puede ayudar, lo agradeceré de todo corazón”, pidió.

El día que se lo llevaron, Tommy llevaba puesto “un ponchito con corderito, color negro con patitas en colores”.
Si alguien tiene algún dato del paradero de Tommy, puede llamar al número 15 6865 5201 (Silvia, dueña de Tommy).