Las frases más destacadas de CFK en el Foro Mundial de Derechos Humanos

Con críticas dirigidas a los medios de comunicación, el Poder Judicial y dirigentes del arco político opositor, la expresidenta fue la encargada de cerrar el encuentro.

Ayer por la noche, la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner fue la encargada de cerrar el encuentro "Voluntad popular y Democracia. Del partido militar al partido judicial, las amenazas a la Democracia", en el Centro Cultural Kirchner (CCK), en el marco del tercer Foro Mundial de Derechos Humanos, organizado por el Grupo de Puebla. Allí, volvió a denunciar la persecución judicial perpetrada contra quienes “igualan a las sociedades” y criticó la administración desarrollada del 2015 al 2019.

Acompañada por expresidentes de la región y del mundo, Fernández de Kirchner hizo hincapié en el fenómeno del Lawfare, el cual, según consideró, “inunda toda la región”. "Las sentencias se escriben en los medios de comunicación y después un juez o un fiscal suscribe la sentencia", manifestó, al tiempo que indicó que el objetivo es “la criminalización de la política, aunque, no de toda, sino de la que tienen que ver con la redistribución del ingreso y la movilidad social ascendente".

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Con el salón colmado que, cada tanto, coreaba “Cristina presidenta”, la titular del Senado advirtió que la perscusión que padecen los gobiernos “populistas” por parte del poder Judicial no se debe a que sean “de izquierda, de derecha, de abajo o de arriba”, sino por los derechos garantizados. "Nos persiguen porque igualamos a las sociedades, por la justicia social, por el derecho de los trabajadores a participar activamente en el producto bruto de lo que producen", sostuvo.

En ese marco, señaló que la nueva oleada de neoliberalismo en el país comenzó a partir de diciembre de 2015 y recordó que el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y el exministro de Economía Nicolas Dujovne, en aquel momento, remarcaron que, por un lado, “había reservas en el Banco Central” y, por el otro, que “había niveles de endeudamiento bajísimos, tanto a nivel del Gobierno, como de las empresas y las familias”.

“En el 2015 no había deuda, ni de empresas, ni de Estado, ni de familias, tampoco estaba el Fondo Monetario Internacional, además había reservas en el Banco Central y los salarios reales no estaban rezagados, me quieren decir ¿Qué hicieron en cuatro años que entregaron el país hecho percha en el 2019?”, cuestionó la  expresidenta, acompañada por los cánticos de la multitud.

En esa línea, volvió a poner todas las fichas en la persecución mediática y judicial y subrayó que “después del 2015 comenzaron a montar un relato sobre ‘se habían robado un PBI’” y redobló: “El PBI se lo llevaron ellos con el FMI y todavía no sabemos dónde está”. “Cuando uno decide jugar de un lado sabe que no es gratis: si vas con los otros y con los medios, no tenés problema, te ven rubia, alta, de ojos azules. El problema es cuando una decide jugar del lado de los pueblos y de las grandes mayorías nacionales”, planteó.

Cerca del final de su discurso, se refirió al “drama de este tiempo, de la región y de las sociedades” que es el narcotráfico y arremetió que su ingreso se permite cuando el neoliberalismo “finalmente desplaza al Estado y el narco ocupa su lugar”. Nos quieren convencer que pelean contra el narcotráfico porque están presos chicos o mujeres que andan en el narcomenudeo, pero si tenemos que luchar contra el narcotráfico primero tenemos que desarmar el sistema financiero que es el que lava la guita del narco", determinó.

"No me importa si me van a inhabilitar, si me van a meter presa, no me importa. Lo que me importa, fundamentalmente, es que volvamos a reconstruir un estado democrático y constitucional, en el cual las garantías que establece la constitución no sean cartón pintado", concluyó.