El testimonio de “Tato” Maglio, matancero baleado en el Congreso: “Fue todo muy orquestado”
En medio del abuso de violencia por parte del Estado en la multitudinaria movilización del “Jubilazo Federal” junto al Congreso, el referente peronista concurrió al lugar y recibió al menos un balazo de goma en una pierna.
El referente peronista matancero Gustavo “Tato” Maglio concurrió ayer al “Jubilazo Federal” en la puerta del Congreso. Fue con fines periodístiscos, junto con otras personas con las cuales comparte un programa radial local. Allí, en medio del caos y del abuso de la violencia legítima por parte de efectivos de las diferentes fuerzas del Estado nacional, Maglio recibió, al menos, un balazo de goma en una pierna.
En comunicación con El1, el dirigente justicialista contó de primer mano lo vivido. “La idea de ir nació de mí y de la gente con la que hacía el programa de radio. Le pusimos toda la onda, veíamos que todos los miércoles a los pobres jubilados les pegaban. Y vimos que había que hacer algo, porque mañana los jubilados vamos a ser nosotros”.
“Fue un desastre, y más por la agresión, por la forma en que los policías pateaban a los jubilados. Movilicé como ciudadano. Tengo un programa de radio donde me comprometí a acompañar a los abuelos, y lo que viví no tiene explicación. No hay explicación para esto que ocurrió, tan bestial”.
La reconstrucción de los hechos
Al reconstruir lo vivido, Maglio recordó: “Al lugar no llevamos ningún tipo de banderas. Cuando llegamos nos encontramos con una represión terrible. Un operativo muy armado como para, ellos mismos, hacer el quilombo. Había barras, hinchas. Pero también había mucha gente que fue por medios propios, que tenía ganas de ir y acompañar a los jubilados”.
"La policía tenía infiltrados, nadie me lo contó, yo lo vi".
“Seguramente hubo infiltrados para hacer quilombo. La policía tenía infiltrados por todos lados, haciendo desmanes. Eso yo lo vi, no me lo contó nadie. Con patrulleros que dejaban a dos o tres cuadras, con las puertas abiertas y sin nada, para que la gente rompa los vidrios y todas esas cosas. Fue todo muy muy orquestado. En un momento vi gente con chalecos de la Policía Federal llevándose a cualquiera”.
A pesar de estar simplemente observando y registrando la manifestación, parte de esa violencia llegó hasta Maglio. “Nosotros estábamos en la esquina de la calle Entre Ríos. Antes de llegar a Avenida Rivadavia, en la otra esquina del Congreso, estábamos ahí tranquilos. Había muchos medios ahí, haciéndole nota a los jubilados, gente mayor, muy grande. Y repente, los tipos empezaron a tirar como si nada, y nosotros no teníamos nada que ver ni con barras ni con las hinchadas”, relató.
Maglio y el relato de la violencia padecida en primera persona
“A la izquierda estaba un cordón policial, enfrente teníamos otro cordón policial. Estábamos en el medio de ellos y empezaron a tirar como si nada. No sé dónde pegó (un balazo de goma). No sé si pegó en el cordón. Yo justo venía cruzando la calle, porque estaba mi compañero haciendo una nota a un jubilado, y me pegó una bala de goma en el pie y la otra saltó al muslo y esa era la que me dolió. Me hizo un agujero grande y me llevaron ahí. Nos atendieron rápidamente. Después nos quedamos mirando todo y no podíamos entender cómo le pegaban a cualquiera”.
“Me quedé apoyado en una esquina. Me quedé un rato ahí porque no podía mover las piernas. Hasta que vimos que estaba terminando un poco el quilombo, porque los gases lacrimógenos no te dejaban ver. Yo estaba a un metro de la jubilada que terminó rompiéndose la cabeza contra el cordón por la agresión policial. Le pegaban a cualquiera, tiraban desde gases lacrimógenos hasta bombas para arriba, que fue la que le pegó en la cabeza a (Pablo) Grillo (el fotógrafo herido de gravedad)”.
"Me duele no haber visto dirigentes de la oposición en la movilización".
En este contexto, lo que más lamentó Maglio fue la gran ausencia de dirigentes y referentes de la oposición. “Lo que más me duele es no haber visto a dirigentes a la cabeza de la movilización. Es una vergüenza. Tenemos un gobierno producto del fracaso de los mismos dirigentes que hoy están todos escondidos bajo la tierra”.
“(Los agentes) no preguntaban con quién viniste, qué hacés, nada. Esa era la orden, reprimir. Me parece que ellos fueron a generar más violencia. La gente, el pueblo, cada vez se anima más y de mi parte siempre estaré del lado de la gente. Vamos a seguir a acompañando a los abuelos”, remarcó.