San Justo: “motochorros” balearon a un comerciante en un robo y se dieron a la fuga

El hecho ocurrió en las inmediaciones de un local ubicado en Cerviño y Carrasco. Según pudo saber este medio, la víctima se encuentra estable.

Un comerciante fue baleado por dos “motochorros” durante un robo cometido en las inmediaciones de un local ubicado en el cruce de las calles Cerviño y Carrasco, en la localidad de San Justo, partido de La Matanza.

El hecho ocurrió en horas del mediodía de este viernes, cuando la víctima llegaba en su vehículo. La secuencia del ataque quedó registrada en la cámara de seguridad de la cuadra, que da cuenta del accionar de los asaltantes.

Según pudo saber El1, tras el violento hecho, la víctima fue trasladada al Policlínico Central de San Justo, donde se encuentra estable y fuera de peligro. En tanto, los ladrones se dieron a la fuga por las arterias del vecindario y aún no se han establecido su paradero.

Otro ataque “motochorro” en San Justo

El miércoles, un colectivero de la línea 174 observó que “motochorros” estaban robando un auto, quiso evitar el asalto y les tiró la unidad encima a los asaltantes, pero todo terminó en una tragedia: los delincuentes empezaron a disparar y mataron a una pasajera, identificada como Hilda Tello, que viajaba en el colectivo.

Según informaron fuentes policiales, el hecho ocurrió en horas de la mañana en las inmediaciones de las calles Coronel Lynch y Libertador General San Martín. “Un vecino se encontraba lavando su vehículo cuando es abordado por cuatro masculinos armados en dos motovehículos que intentan sustraerle su vehículo”, detallaron voceros de la fuerza.

“Fue trasladada por el chofer a la clínica ´San Francisco´ (a dos cuadras del asalto), donde se establece que se encontraba fallecida”, indicaron voceros policiales. Tras el crimen de Hilda Tello, vecinos y vecinas salieron a la calle para pedir seguridad.

Según lo detallado por los lugareños, pese a la colocación de alarmas o cámaras de seguridad para advertir hechos delictivos, la situación no cambia. “Antes era un barrio muy tranquilo, pero ahora no. Por eso la preocupación de los vecinos es enorme y lo que pasó con esta mujer nos dejó muy tristes, porque nos hizo sentir que le puede pasar a absolutamente cualquiera en el barrio”, contó Jorge, un vecino de la zona.