Difundieron los fundamentos de la sentencia por el crimen del colectivero Pablo Flores

El Tribunal argumentó por qué resolvió absolver a Oscar Ezequiel Vega, Néstor Fabián Marone y su hijo Adrián Alberto Marone, imputados del delito de “Homicidio calificado por el uso de arma de fuego” en perjuicio del chofer de la Empresa Almafuerte.

El tribunal que absolvió el pasado 12 de septiembre a tres hombres acusados de asesinar hace dos años al colectivero Pablo Flores, de la línea 218, perteneciente a la Empresa Almafuerte, fundamentó su decisión en las "serias irregularidades en la investigación".

Además, los magistrados advirtieron que las fallas en el proceso de investigación no permitieron develar el móvil del crimen y profundizar otra pista, debido a que la fiscalía buscó "concluir el caso de un modo rápido y superficial". Según fundamentaron los jueces en el fallo, "las propias víctimas indirectas fueron quienes se preocuparon por tratar de encontrar una explicación a lo ocurrido con Flores, la fiscalía se ocupó de concluir el caso".

Teniendo en cuenta estos fundamentos, el Tribunal en lo Criminal N° 5 absolvió a Oscar Ezequiel Vega, Néstor Fabián Marone y su hijo Adrián Alberto Marone, todos ellos imputados del delito de "Homicidio calificado por el uso de arma de fuego, por ser cometido con el concurso premeditado de más de dos personas y con alevosía", en perjuicio del colectivero.

Cronología del crimen

1 de octubre de 2020

Flores circulaba en el interno 75 de la línea 218 en reemplazo de un compañero cuando, según testigos, dos hombres pararon el colectivo, se acercaron por el lado izquierdo de la unidad a la ventanilla del conductor y efectuaron varios disparos, tres de los cuales dieron en la cabeza del chofer, que murió en el acto. Durante el violento suceso, el transporte que manejaba Flores se estrelló contra un árbol y los atacantes escaparon en un Peugeot 504 blanco que los esperaba en marcha con un cómplice al volante.

6 de octubre de 2020

Efectivos de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de La Matanza realizaron un allanamiento en Virrey del Pino y detuvieron a dos hombres, identificados como Adrián Marone y Oscar Ezequiel “Boli” Vega, acusados de ser los responsables del hecho. Aun quedaba un prófugo. 

En los operativos, los uniformados incautaron tres armas y diez celulares. Según informaron fuentes policiales, se confiscó una pistola Bersa calibre 380, una pistola Taurus calibre .45 (que coincide con el calibre utilizada para asesinar a Flores) y un revolver Pasper calibre 22 con ocho cartuchos. 

30 de diciembre de 2020

Personal de la Policía Bonaerense detuvo a Néstor Marone, el tercer implicado, quien quedó detenido por el delito de "Homicidio calificado por el uso de arma de fuego, por ser cometido con el concurso premeditado de más de dos personas y con alevosía".

Uno de los puntos importantes en la pesquisa fue el hallazgo de una campera de River Plate que los testigos indicaron como una de las prendas utilizadas por uno de los asesinos. Además, el vehículo en que se movieron los asesinos.

18 de julio de 2022

Con todas las pruebas reunidas, elevaron a juicio la causa por el crimen de Flores. De acuerdo a la acusación fiscal, Vega y el menor de los Marone, "previo acuerdo de voluntades y división de roles, obrando a traición y sobre seguro", armados con una pistola Taurus calibre .45 "la cual fuera aportada por Néstor Marone, efectuaron al menos cuatro disparos con claras intenciones de causarle la muerte".

Según quedó constatado, tras dispararle, los agresores escaparon en un Peugeot 504 blanco propiedad de Vega. El fiscal Medone, quien instruyó en la causa, consideró que "la cercanía con que se efectuaron los disparos lleva a presumir que sorprendieron a la víctima, quien no atinó a realizar el mínimo acto instintivo de defensa".

De acuerdo a la autopsia practicada, el colectivero recibió cuatro disparos, tres de ellos en la cabeza y el restante en el abdomen. En su pedido de elevación a juicio, el fiscal entendió que Néstor Marone "ha sido quien facilitó y luego resguardó la pistola calibre .45, marca Taurus, desembocando ello en una clara complicidad primaria".

En tanto, Marone hijo y "Boli" Vega fueron acusados de ser el autor del disparo y quien manejó el Peugeot 504 para escapar del lugar, respectivamente. Fue un testigo del hecho quien señaló que Vega era quien conducía el auto.

La principal hipótesis es que los agresores querían cometer un ajuste de cuentas con otro chofer y se confundieron al asesinar a Flores, que esa noche reemplazaba a un compañero en la unidad.