La pobreza alcanzó al 40,1 por ciento de la población
El dato del INDEC refleja una suba respecto del 39,2 registrado en el relevamiento previo. Además, la indigencia llegó a 9,3 por ciento.
En la tarde de este miércoles, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) dio a conocer su informe de “Principales resultados de la incidencia de la pobreza y la indigencia”, que da cuenta de que la pobreza creció y alcanzó al 40,1 por ciento de las personas en el primer semestre del año.
Dentro del 40,1 por ciento de pobreza, se destaca un 6,8 por ciento de hogares que están por debajo de la línea de indigencia, que incluyen al 9,6 por ciento de los individuos. Así, la pobreza creció con respecto al 39,2 por ciento del segundo semestre de 2022, pero es menor que el 40,6 de hace dos años. En tanto, la indigencia también es mayor que el último registro, de 8,1 por ciento.
Además, teniendo en cuenta la incidencia de la pobreza y la indigencia resultantes de la capacidad de acceso a la canasta básica alimentaria y la canasta básica total en relación con los ingresos, se observó que, frente al semestre anterior, el ingreso total familiar promedio aumentó 50,4 por ciento, ante subas promedio de 52,6 por ciento de la CBA y 48,8 de la CBT.
Asimismo, contemplando que la brecha de la pobreza es la distancia entre los ingresos y las canastas de los hogares pobres, se relevó que el ingreso total familiar promedio de los hogares pobres fue de 124.071 pesos, mientras que la CBT promedio de estos hogares trepó a 199.593. Así, la brecha de pobreza de los hogares se ubicó en 37,8 por ciento.
En lo que concierne al impacto de la pobreza en los distintos grupos etarios, el más afectado fue el que va de cero a 14 años, con un 56,2 por ciento del total de 40,1 de pobres. En la población de más de 65 años, se afectó al 13,2 por ciento. Por último, las regiones con mayores índices de pobreza fueron el Noreste, con un 42 por ciento; y el Gran Buenos Aires, con 41,4.
Vale destacar que estos datos corresponden al primer semestre del año, con lo cual todavía no se había aplicado la devaluación de poco más de 20 por ciento que tuvo una repercusión inmediata en la inflación y, por ende, en los salarios. Hasta agosto, la inflación acumulada del año es de 80,2 por ciento, en tanto que el índice interanual llegó a 124,2.