La escasez de gasoil, o el dilema de consumir más de lo que se produce

Por Sebastián Scheimberg*

Hay un problema estructural: el gasoil que producimos no alcanza para nuestro consumo. Si hacemos las cuentas, vemos que se consume más de lo que se produce, con lo cual se completa el consumo con importaciones. Un gran porcentaje del gasoil va al transporte de carga y al transporte urbano. Quedarnos sin gasoil es un problema enorme porque es un insumo de primera necesidad. Además, hay un sesgo hacia el transporte carretero, con lo cual, si no está el insumo para mover los camiones, uno se queda sin el consumo de bienes. El transporte férreo es un pendiente de primera necesidad que hay, sobre todo, para el transporte de carga.

Cuando se explote Vaca Muerta, se verá que se trata de un petróleo más liviano que el que producía Argentina en la Cuenca Neuquina o en la del Golfo San Jorge. El petróleo es un insumo para el proceso de refinación. Y, como este petróleo es más liviano, tiene una calidad por la cual el procesamiento produce cortes de productos más livianos, como GLP y naftas, así que se agrava el problema porque hay un petróleo que produce menos gasoil que antes.

Otro punto es que tuvimos un tema con las refinerías en el primer trimestre, por lo que el out put de gasoil se redujo. Y a esto se suma que hay un sesgo muy grande al consumo de gasoil. Se podría pensar si, en el largo plazo, no conviene mutar hacia otro tipo de combustible para el transporte, como el gas natural.

Desde principios de los años 2000, cuando se sancionó la Ley de Biocombustibles, la ley implicaba que el gasoil debía estar mezclado con biodiesel, un combustible más ecológico, con menos emisiones de gases de efecto invernadero. Pero esta mezcla se aumentó hasta el diez por ciento y se demostró que hasta un 20 por ciento podría funcionar perfectamente. Argentina es exportador neto de biodiesel, tiene una ventaja comparativa y competitiva con esta producción. De golpe, hubo una decisión que redujo el corte del diez al cinco por ciento, con lo cual se agravó el problema porque había abundancia de biodiesel y escasez de diésel o gasoil, producto del hidrocarburo.

"Festival de importaciones"

Me parece desafortunada la frase “festival de importaciones” de la vicepresidenta porque creo que, si uno va a cuestionar, tiene que dar una propuesta. Los individuos buscan posicionarse en aquellos bienes que tienen menor precio relativo. En este caso, si está la posibilidad de acceder a bienes que se compran al tipo de cambio oficial, que está muy atrasado, se tiende a sobredimensionar las importaciones, eso es cierto.

Creo que, en este momento, el desdoblamiento cambiario podría ser una alternativa para tener un dólar comercial y un dólar financiero, aunque se seguiría con el mismo problema porque el dólar comercial estaría más barato. También es cierto que Argentina necesita insumos importados para generar los bienes que produce.

Segmentación de tarifas

El Gobierno está comunicando que se entrecruzará información de ingresos con información de la AFIP y de otro tipo para ver qué sector pasará a pagar la tarifa plena. Es necesario que el plazo para registrarse sea extenso. Siempre hay problemas por defecto, lo que es inevitable. Hay un caso extremo, como puede ser el de un dealer, que no tiene nada declarado, y no va a estar computado en el grupo de los exentos al subsidio. Sin dudas, habrá injusticias.

Plazos fijos UVA, la nueva alternativa

Con respecto a la gente que tomó un crédito UVA, tiene que tomar su caso como si estuviera alquilando. Tiene lógica que, con el plazo fijo UVA, uno tenga un instrumento disponible en el que no pierda el valor del dinero, que se desvaloriza por la inflación. Si uno no tiene esa alternativa, se va de cabeza al dólar, pero el exceso de demanda de un bien genera un aumento de su precio.

*Economista y docente de la UNLaM