Dólar blue, inflación, FMI y el drama de una problemática económica circular

La economista Lucía Nogara, integrante del Centro de Economía y Política Argentina (CEPA), analizó el delicado presente económico. Por qué hay que tener en cuenta a los oligopolios, cuáles serían las verdaderas consecuencias de la dolarización y qué hacer con el acuerdo con el FMI.

Por Lucía Nogara*

Para hablar sobre el dólar, hay que aclarar algunas cuestiones. Primero, que se trata de la suba del dólar blue, un mercado que es ilegal, con lo que es muy difícil saber quién está detrás de este mercado. Las personas pueden pensar que esto se puede traducir en precios, pero hay que discutir otras cuestiones.

Las empresas que producen los productos que uno compra en las góndolas de los supermercados no compran insumos en dólar blue, sino que los compran al valor del dólar oficial. Así, venden en las góndolas productos remarcados a dólar blue. Esto es importante porque es una de las causas que explica el índice de inflación que tenemos mes a mes, sobre todo, en los alimentos. La realidad es que los 20 oligopolios que hoy manejan las góndolas y producen los productos que consumimos compran sus insumos al valor del dólar oficial.

Este escenario no es como el de la hiperinflación de 1989 porque Argentina no tenía los niveles inflacionarios de hoy, sino que llegó a 3.500 por ciento en aquel año, además de que las reservas tampoco eran las mismas, con lo que hay una cuestión de operar en la desesperación e incertidumbre de la gente porque estamos en campaña electoral.

Dolarización, ¿la solución?

A raíz de la reunión que hubo en el foro de Llao Llao el 18 de abril pasado, las personas que asistieron como precandidatos presidenciales presentaron una suerte de medidas o programas ante la inflación. Ahí, hay distintos personajes. Uno es Javier Milei, que trajo a colación la dolarización.

Hubo un común acuerdo en que la dolarización no sería la mejor herramienta para resolver la inflación, sino que significaría un shock de licuación salarial. Esto se llevaría puestas PyMEs, industrias y fuentes de trabajo. Además, la trampa es que dicen que uno ganaría en dólares, pero no dicen cuántos dólares.

El FMI y una inevitable renegociación

Nosotros, constantemente, somos mirados por la lente del Fondo Monetario Internacional (FMI) porque se tomó una deuda extremadamente grande que no se puede abordar en sus metas de pago. Además, dan una receta de cómo se debería administrar el gasto del país. Esto se traduce en que la gente debe pagar más por las cosas.

Argentina no es el país que más gasta ni que más impuestos tiene en el mundo. Y, al instalar este discurso, no se cuentan las consecuencias de quitar planes o subsidios. La falta de dólares o la alta inflación no se resuelven con dolarización, quita de subsidios o aplicando el plan de (Domingo) Cavallo, como dijo (Horacio) Rodríguez Larreta.

Estaría bueno evitar estas corridas cambiarias que afectan a toda la población. También sería importante que se revea el acuerdo con el FMI. Máximo Kirchner fue uno de los primeros en advertir que el acuerdo alcanzado con el FMI no se iba a poder cumplir. Creo que hay que revisar por este lado.

*Economista e integrante del CEPA