Lugano realiza una obra faraónica en su estadio

Con fondos propios, el club de Tapiales instalará un sistema de riego computarizado y abovedará el campo de juego, con caída para ambos lados. “Le hemos dado una impronta de una cancha de otra categoría”, comentó el presidente.

En tiempos donde afrontar un proyecto es todo un desafío, el club Lugano encaró una obra majestuosa y digna para el aplauso en el estadio José María Moraños. La institución que milita en la Primera D del fútbol argentino levantó todo el piso de su cancha para instalar un sistema de riego computarizado y ejecutará un abovedado del campo de juego, con caídas para sendos lados, para evitar la inundación del terreno.

 “Es una obra muy importante y que necesitábamos hacer desde hace bastante tiempo. Con este receso pudimos coordinar para comenzar con los trabajos y tener la cancha lista para cuando comience el campeonato”, le comentó Miguel Pascucci, presidente del Naranja, a El1 Digital.

“Hemos levantado toda la tierra, se compactó el piso, se relleno en algunos sectores, se efectuará el abovedado, instalaremos el riego de última generación y se colocarán los panes de césped. Le hemos dado una impronta de una cancha de otra categoría y da gusto ver lo que realizaremos, con los escasos fondos que tenemos”, agregó el dirigente.

Cuando se lo consultó si hubo algún aporte de alguna empresa, Pascucci destacó que todo el emprendimiento es afrontado con los fondos del club. “Todo fue con el esfuerzo de los socios y de algunas empresas que nos ayudan con publicidad. Hemos hecho algunos ahorros y pudimos concretar la obra. Hay muchos que ascienden y hacen la cancha; nosotros hacemos la cancha para después ascender”, manifestó.

Esta obra es el corolario de distintos trabajos que se realizaron en el predio de Tapiales en los últimos meses, principalmente durante la cuarentena, como el embellecimiento de las plateas, el nuevo ingreso al sector detrás del arco que da a Crovara, el sistema de riego para la cancha auxiliar, la construcción del muro perimetral, entre otras tareas.

“Durante la pandemia no hemos parado nunca y ahora estamos proyectando otra obra, la cual estamos viendo cómo la financiamos. Queremos tener un gimnasio cubierto. Pero vamos de a poco, porque todo lo que hacemos es con el esfuerzo de todos y no queremos equivocarnos”, indicó.

Fotos y video: Prensa Lugano