El Mirasol sufrió una dura derrota ante Chacarita

Almirante le ganaba 1 a 0 al Funebrero y mostraba una buena imagen, pero bajó su nivel en el segundo tiempo y terminó perdiendo 3 a 1 en el final del partido. El equipo volvió a ser despedido con silbidos e insultos.

Nada le sale bien a Almirante Brown. Puede hacer un buen primer tiempo y ponerse en ventaja, como ocurrió este domingo ante Chacarita en Casanova, pero el final de la historia casi siempre resulta ser el mismo: una derrota que lo mantiene hundido en el fondo de la tabla.

Es justo decir que los primeros 45 minutos que jugó el Mirasol fueron de lo mejor del conjunto aurinegro en el campeonato. Con mucha movilidad y gran intensidad para recuperar la pelota, superó al Funebrero de principio a fin. Se puso 1 a 0 con un gran cabezazo de Matías Pérez Acuña. Y hasta pudo haber estirado la diferencia si hubiese estado más fino en las contras de que dispuso. Se presentaba el escenario ideal para festejar el partido número 1.000 en el Fragata Sarmiento con un triunfo.

Pero los partidos duran 90 minutos, no 45. Y en el complemento Almirante se cayó físicamente, Chaca levantó su nivel y el encuentro se tornó mucho más parejo. Para colmo, el elenco de San Martín lo empató rápido con un zapatazo desde afuera del área de Federico Bravo que se metió en el arco defendido por el Mono Martínez después de pegar en la base del palo derecho.

Un mal final

El 1-1 parecía inamovible. A ninguno de los dos le caía del todo mal. Pero Chacarita se mostraba más entero. Y, cuando faltaban cuatro minutos, terminó cumpliéndose eso de que a Almirante nada le sale bien. Tras un córner, Alejandro Rébola la bajó de cabeza y Gonzalo Errecalde (sí, un ex Brown como para que dé más bronca) terminó rompiendo el arco con un derechazo inatajable.

El tercero llegó cuando ya no quedaba más tiempo. Y sin Ramiro Martínez en el arco, ya que había ido a buscar el cabezazo en la última pelota del partido. Pero pasó lo esperado de acuerdo con el presente que vive Brown: el balón salió rechazado y le quedó a Juan González quien, desde lejos, definió con el arco vacío.

No hubo tiempo para más nada. Solo para el pitazo final de Jorge Baliño, que liberó el malestar de los hinchas del Mirasol, quienes despidieron al equipo con silbidos e insultos.

Con esta nueva derrota (la sexta en el torneo), el equipo de Guillermo Szszurak se mantiene en el puesto 16, solo por encima de los equipos que están en zona de descenso: Defensores Unidos y Talleres de Remedios de Escalada.

En la próxima fecha, Almirante buscará levantar cabeza en un escenario que pinta muy difícil: la cancha de Defensores de Belgrano, ante un Dragón que pelea bien arriba en la zona B. El horizonte que se avecina es complicado. Y mucho más para un equipo al que nada le sale bien.