Iván Papetti, tras su paso por “La Voz Argentina”: “La diversidad musical es muy importante y necesaria”
Su corta edad y experiencia escénica no fueron obstáculos para su gran desempeño en el reality musical. Con su simpatía y talento, el cantante de San Antonio de Padua cautivó al público, llegó a la anhelada final, recibió elogios de Michael Bublé y enseñanzas de Lali Espósito, Soledad Pastorutti y Mau y Ricky Montaner.
Una de las singularidades de la música es su atemporalidad, por lo tanto, cantantes de diferentes generaciones pueden conocer, interpretar y reversionar temas provenientes de cualquier época. Esta premisa es la que Iván Papetti experimentó en su ascendente trayecto por La Voz Argentina (Telefe), donde sus 18 años de edad no le impidieron cantar temas clásicos de icónicos artistas, de hecho, pudo homenajearlos y, a su vez, imprimirles su propio sello. En cada etapa del certamen televisivo el joven proveniente de San Antonio de Padua no solo desplegó su talento, sino que, además, desarrolló su capacidad de adaptación para transitar distintos estilos y equipos de competición, hasta llegar a convertirse en uno de los queridos finalistas.
Tras la vorágine vivida en el transcurso del reality, el participante que se consagró con el tercer puesto regresó a clases en la Escuela Técnica N°3 de San Antonio de Padua, donde cursa el último tramo de su formación. Asimismo, trabaja en la continuidad de su trayectoria musical. En diálogo con El1 Digital, expresó: “¡Disfruto mucho cantando! Mi objetivo es llegar a transmitir algo con cada canción, poder vivir una historia”.
Persevera y triunfarás
Antes de convertirse en un concursante del programa musical argentino, Papetti ya era un fiel espectador del formato, tanto de las ediciones nacionales como internacionales. Y llevaba consigo el sueño de anotarse y vivir la experiencia. Hasta que, este año, una amiga suya le contó sobre la realización del casting para la cuarta temporada de La Voz Argentina, por lo que decidió inscribirse y concretar su deseo.
“Me acompañó mi viejo, fuimos a ver cómo era todo. Llegamos a las siete de la mañana, aunque el casting era a las diez, y teníamos 5000 personas adelante. Entonces, le dije 'No tiene sentido esto, volvamos a casa'. Pero ahí empezó una discusión, y terminó ganando él. Nos quedamos y estuvimos ahí hasta que entré a las cuatro de la tarde”, recordó.
Luego de superar dos instancias de audiciones multitudinarias, que consistían en cantar fragmentos de distintos temas, recibió la sorpresiva noticia de su ingreso a la competencia: “Fue un poco una locura, algo que no esperaba, principalmente por la cantidad de gente que había visto. Cuando recibí el llamado y me dijeron que había quedado, la verdad que no lo podía creer, ¡estaba con mucha alegría!”.
Crecimiento entre equipos
Aunque Iván ya había tenido algunas experiencias artísticas frente a conocidos y pequeños públicos, ya sea en la interpretación de canciones en familia o del Himno Nacional Argentino en el colegio, el estudio televisivo representó su primer gran escenario y, también, una escuela musical acelerada. “Siento que no terminé de caer en toda la situación hasta que terminó. Ahí pude relajarme, empezar a pensar y revivir todos esos momentos. Tuve mucha suerte de poder formar parte y de haber aprendido tanto, ¡todavía me cuesta creerlo!”, valoró.
La audiencia y los entrenadores del show lo conocieron en el marco de las “Audiciones a ciegas”, donde cantó Love Me Tender de Elvis Presley y logró que tanto Lali como Soledad presionaran sus botones y voltearan sus sillones en busca de su potente voz. Sin embargo, Espósito bloqueó a Pastorutti, por lo que el participante se fue directamente con la cantante pop y, a continuación, cantó el bolero Bésame mucho.
En la siguiente ronda, “Las Batallas”, hizo junto a Estef Figueroa – quien ganó el duelo- el Medley Elvis Presley. Tras el gran ensamble, Espósito manifestó su orgullo y resaltó la manera en que se soltó corporalmente el participante de 18 años. “Lali me ayudó a ganar confianza, a sentirme cómodo en el programa”, agradeció. Luego de quedar eliminado en el ring, tanto la cantante del Tren del cielo como Mau y Ricky Montaner se disputaron su robo, y él escogió a la referente del folclore.
Llegaron “Los Knockouts” y cantó de manera solista The Way You Look Tonight de Frank Sinatra, enfrentándose a María Belén del Greco. El nivel fue muy parejo y Pastorutti distinguió una singularidad del adolescente, su voz reconocible, pero inclinó la balanza por la concursante santafesina. “La práctica de esa gala la tuve con Sole y Diego Torres. Aunque no estuve muy correcto ese día, viéndolo después, ese ensayo me ayudó mucho por los consejos que me dieron, en cuanto a los movimientos en el escenario y a cómo expresar lo que uno siente cuando está cantando”, subrayó. Cuando el muchacho se volvía a despedir en el ring, otra vez fue robado, esta vez, por los hermanos Montaner.
Sobre la oportunidad de ser rescatado en varias ocasiones por diferentes coachs, ante su posible eliminación del certamen, confesó: “¡Eso fue un poco una locura! La primera vez que perdí, en 'Las Batallas', quizás tenía la esperanza de que me robaran, porque en 'Las audiciones a ciegas' Sole había dado a entender que por ahí se daba esa posibilidad, entonces me puso muy contento cuando me eligió. Pero, la segunda vez, cuando ya estaba en el equipo de ella, perdí y me robaron Mau y Ricky, no me lo esperaba para nada, fue una sorpresa total, pensé que me iba, de hecho, ya estaba pensando en lo que iba a decir al despedirme”.
Siempre hacia adelante
Desde “Los Playoffs” hasta la gran final Iván se mantuvo dentro del conjunto liderado por los hermanos Montaner. Cabe aclarar que, a partir de esa instancia, la continuidad de los participantes en el concurso pasó a depender del voto del público, el cual apoyaba con entusiasmo a Papetti. Una sorpresa fue cuando el joven interpretó Never gonna give you up de Rick Astley, que recibió el saludo de un referente de su género predilecto, Michael Bublé, quien le expresó: “Me gustó tu voz, es increíble, quiero decirte felicitaciones. ¡Buena suerte con todo mi amigo, continúa así!”.
En los “16vos de final” puso su voz al tema It´s not unusual de Tom Jones, en los “8vos de final” llegó al escenario para deslumbrar con el popular Mambo No. 5 de Lou Bega, y en los “4tos de final” se presentó con el clásico I Dreamed a Dream del musical Los Miserables y se lo dedicó a su abuela, ya que conoció la canción por ella.
En relación a la variación de géneros musicales que debió afrontar a lo largo de la competencia, planteó: “Lo viví como un desafío. Al principio con muchos nervios, porque yo soy del palo del jazz y quería mantenerme en ese estilo. Me hicieron cantar pop, que me gusta, pero no es algo a lo que estoy acostumbrado. Después me fui acomodando y me fui soltando, empecé a jugar y a relajarme un poco más, que también es una parte del show. Así que fue importante y necesario para mí, para aprender”.
La dificultad del último tramo
Como afirmaba TUSAM, “Puede fallar” y, en la “Semifinal”, cuando el artista de San Antonio de Padua llevó al show A little respect de Erasure, tuvo algunos problemas con la letra. “Esa gala fue muy negativa, erré en prácticamente toda la canción. Los días antes de esa presentación no estaba durmiendo bien, además tuve poco tiempo para practicar, obviamente también fallé yo y, si bien es un temazo, no era de mis favoritos. Fue una combinación de cosas que me hicieron fallar, y la pasé mal. Igual seguí peleándola, no me quería rendir. Pasé a la final y tuve el apoyo de la gente, eso es algo que valoro y rescato mucho”, relató.
Asimismo, reflexionó: “En ese momento no vi como algo bueno lo que me pasó, pero, hoy, lo tomo como algo positivo, a pesar de que cueste verlo así. Creo que la próxima vez que falle no me va a doler tanto como esa vez. De todo se aprende. Trato de sacar lo positivo de esa experiencia y del apoyo del jurado, que fue muy importante para mí, además de la elección del público”.
Durante la emocionante velada de la gran final, Papetti protagonizó diferentes números musicales: abrió el show cantando Volver a empezar junto a los otros finalistas, Ángela (Team Lali), Elías (Team Montaner) y Yhosva (Team Soledad); luego, interpretó Llorar y llorar junto a sus coachs y, de forma individual, hizo Piel canela. Antes de concluir la emisión, Marley anunció el veredicto de la audiencia y el muchacho se quedó con el tercer puesto del reality.
“Realmente no pensé que iba a llegar a la final. Desde el principio mi objetivo era pasar 'Las audiciones a ciegas' y que se diera vuelta alguien. Antes de cantar pensaba que no lo iba a lograr, y después se fue dando que sí. Fui creciendo, ganando confianza, sorprendiéndome muchísimo con el apoyo de la gente, incluso me cuesta explicar todo el cariño que recibí, ¡fue algo impresionante”, transmitió.
Y el afecto no solo lo percibió dentro del estudio televisivo, se potenció en diversos espacios de los que forma parte. “En todos los lugares en los que hay gente que me reconoce se me acercan para pedirme fotos, todavía me cuesta acostumbrarme, pero es muy lindo. Y en la escuela lo que más disfruto es el cariño y el respeto que me han presentado todos”, distinguió.
Por otro lado, sobre la aventura de integrar el Team Mau y Ricky, resaltó: “A pesar de, quizás, no estar siempre cómodo con los temas, con ellos gané mucha confianza, logré conocer y meterme en otros estilos. Ellos me presentaron diferentes desafíos en distintos géneros musicales y yo traté de dar lo mejor. De ellos aprendí mucho en cuanto a la versatilidad”.
Distintos caminos y una misma pasión: la música
La emblemática banda británica Queen –de la cual Papetti siempre fue fanático- resultó una bisagra para que él arrancara su viaje hacia el pasado y descubriera artistas provenientes de décadas anteriores, como Frank Sinatra, y estilos como el jazz y el instrumental. En ese universo musical encontró cierta comodidad y, a su vez, un fuerte vínculo personal.
No obstante, su interés por el canto nació cerca del 2018. A pesar de que en su casa siempre hubo karaokes y a él le gustaba agarrar el micrófono para interpretar temas como lo hacía Freddie Mercury, fue en ese momento que percibió su aptitud artística y, además, recibió el apoyo de su familia. Así que buscó una profesora de canto y emprendió la travesía.
“La diversidad musical me parece muy importante y necesaria, para aprender y disfrutar. Creo que el gusto musical tiene que ser lo más variado posible, o por lo menos yo intento eso, que sea algo actual y, también, antiguo, porque la música va transformándose a lo largo del tiempo. Asimismo, me enorgullece representar el jazz y lo instrumental, y que a la gente le guste está muy bueno”, ponderó.
Por último, sobre sus búsquedas artísticas, expuso: “Todavía no lo tengo tan claro, sé que quiero cantar, eso sí, es un camino que quiero transitar. Tengo ganas de generar, así que estoy trabajando en eso. Mi objetivo es crear mi propio estilo dentro del género que represento, y quizás incursionar en otros, también. Es algo que todavía tengo que explorar”.
