Apuestan al potencial de la biomasa en el norte del país

El INTI, en conjunto con el CONICET y las universidades nacionales de Tucumán y Misiones, conformará un centro interinstitucional cuyo objetivo es dar mayor impulso a las biorrefinerías y a su capacidad energética al servicio de distintas actividades agroindustriales.

Con el objetivo de contribuir a una mayor producción de biocombustibles, bioproductos y biomateriales, se creará  el Centro Regional Biorrefinerías del Norte Argentino (BioNA), que integrará las capacidades existentes en el territorio y potenciará actividades académicas, tecnológicas e industriales en la región. Tanto el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) como el CONICET y las universidades nacionales de Tucumán y Misiones aportarán acciones en materia de investigación, desarrollo e innovación (I+D+i), formación de recursos humanos y transferencia tecnológica para empresas de la región.

Se estima que esta iniciativa impactará directamente en los sectores cañero, citrícola y forestal, aunque su alcance puede extenderse a otras fuentes de materiales agroindustriales, como el algodón, el arroz, el sector vitivinícola, el olivícola, la yerba, el té, el tabaco y los carbohidratos. Asimismo, la generación de nuevas materias primas y productos finales podrá impactar en las industrias de la pulpa y el papel, la química, textil, farmacéutica, de alimentos, de equipamiento industrial, y de energía, entre otras, de la región y el resto del país.

Según afirmaron desde el INTI, “se podrá avanzar en una etapa intermedia entre la instancia de I+D+i desarrollada en laboratorio y la escala industrial integrada a las cadenas de valor actuales de la bioeconomía”. A su vez, explicaron que “permitirá potenciar el desarrollo socioproductivo de la región a través de proveer recursos humanos y conocimiento para la instalación de plataformas de biorrefinerías”.

A través de este proyecto, la institución de metrología busca hacer foco en la relevancia de “propiciar el desarrollo y el fortalecimiento de las economías circulares en el Norte Argentino, investigar, optimizar y tornar más eficientes procesos y desarrollar nuevas tecnologías y productos incluyendo etapas de escalado, con la finalidad de promover su transferencia e implementación en la agroindustria regional y nacional”.

Por último, aseguraron que esperan entre los resultados, el desarrollo de polos industriales a partir de biomasa, en los que empresas pequeñas, medianas y grandes, de igual o diferente cadena productiva, sean proveedoras y receptoras de insumos: con esa lógica, pueden transformar los residuos de unas en productos de otras. Varias de estas empresas podrían surgir como continuación de las plantas piloto, requerir equipamiento que podría producirse localmente, ocupar mano de obra y generar bioproductos cuya comercialización podría ocurrir en el país o en el exterior.