Desde la Provincia, siguen las advertencias por el “riesgo” que la apertura porteña implica para el Conurbano

Tanto la ministra de Gobierno bonaerense, Teresa García, como su par de Salud, Daniel Gollán, expresaron su preocupación por el mayor flujo de circulación entre el Gran Buenos Aires y la Capital Federal, en momentos en que la tasa de contagio aumenta en territorio porteño.

Luego de que, en su reciente visita a La Matanza, el Gobernador bonaerense, Axel Kicillof, planteara sus diferencias con el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires por el nivel de apertura comercial que habilitó desde la semana pasada y un grupo de intendentes peronistas de la Tercera Sección Electoral de la Provincia se plegara a esas advertencias, la ministra de Gobierno bonaerense, Teresa García, ratificó que, desde la Provincia, entienden que “la apertura en CABA es un enorme riesgo para el Conurbano” bonaerense.

En la semana en que se debe definir cómo continuará la cuarentena cuando culmine la actual etapa del aislamiento, que vence el 24 de mayo, desde la administración Kicillof siguen defendiendo su política de “no habilitar en forma indiscriminada” la apertura de comercios en el AMBA, según reiteró García durante el fin de semana, “dado que el transporte público es el foco más grande” de contagio de coronavirus. Ese dato y esa preocupación son sustentadas, además, por el último relevamiento que la propia Dirección General de Estadística y Censos porteña realizó en base a la Encuesta Permanente de Hogares del INDEC, que da cuenta que el 48,5 por ciento de los puestos de trabajo en Capital Federal son ocupados por habitantes del Gran Buenos Aires.

En esa sintonía, la ministra de Gobierno bonaerense, quien está a cargo de relevar los pedidos de los intendentes para la reapertura comercial e industrial de sus distritos, sostuvo que la flexibilización de la cuarentena en la Ciudad conlleva un “enorme riesgo para el Conurbano” y apuntó: “En la Provincia, tenemos dos realidades, la del interior, donde ya están habilitadas algunas actividades; y la del Conurbano, donde el criterio va a ser muy restrictivo”, remarcó con respecto a la posibilidad de mayor apertura en los 40 distritos bonaerenses pegados a la Ciudad de Buenos Aires, con la que conforman el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).

“Con las aperturas que hizo la Ciudad de Buenos Aires, se incrementó en 500.000 la cantidad de personas que se trasladan. Eso, visto desde el Conurbano, es un enorme riesgo. Se haría muy difícil que, si se abriera o se activaran las mismas actividades que en CABA, los municipios pudieran ejercer el control”, anticipó, mientras en cada municipio sindicatos y cámaras empresariales y comerciales buscan alternativas para retomar la actividad, como está sucediendo en La Matanza.

No obstante, García ratificó que cada decisión del Gobierno bonaerense “es consultada con los intendentes” e insistió en una idea que viene subrayando desde la etapa anterior de la cuarentena. “En su mayoría, la casi totalidad de los jefes comunales del Conurbano han decidido que no hubiera salidas recreativas y que no hubiera apertura indiscriminada de comercios”, aseguró.

“Hay que limitar las salidas, evitar el transporte y que mucha gente salga a la calle para algo al mismo tiempo, sobre todo, teniendo en cuenta cómo se multiplicaron los casos en la Ciudad de Buenos Aires”, enfatizó García, aunque dio lugar a que la producción industrial pueda seguir reactivándose paulatinamente, como empezó a suceder desde la semana pasada, cuando 180 industrias bonaerenses retomaron su actividad, lo que podría acentuarse en los próximos días.

“La mirada está puesta en la reapertura de fábricas o empresas del primero, segundo y tercer cordón, con protocolos muy estrictos, a tal punto que el traslado del personal corre por cuenta de la empresa en transporte privado”, detalló en ese sentido y recordó que, en los distritos del AMBA, “solo se habilitó el comercio de proximidad, de barrio”.

En tanto, el ministro de Salud provincial, Daniel Gollán, se sumó a los funcionarios que expresaron sus diferencias con la apertura porteña y, este domingo, a través de sus redes sociales, apuntó que “el mayor riesgo de irradiación del coronavirus”, hoy, se concentra en Capital Federal, aunque luego intentó matizar su observación al ponderar el “trabajo conjunto” que se lleva a cabo entre los gobiernos bonaerense y porteño.

“Siempre supimos que los grandes conglomerados urbanos serían los lugares más complicados de la pandemia. Por eso, desde el primer día, estamos trabajando coordinadamente con Nación y Ciudad para evitar la propagación de los contagios”, aclaró este lunes, luego de cierto malestar que había generado su posteo del fin de semana, en momentos en que el Gobernador, Axel Kicillof, y su par porteño, Horacio Rodríguez Larreta, deben sentarse junto al Presidente, Alberto Fernández, para decidir cómo continuará la cuarentena en el AMBA a partir de la próxima semana.