En La Matanza, Kicillof monitoreó la emergencia y aseguró que "se están tomando medidas para asistir a los más golpeados”

Sin el intendente Espinoza, el Gobernador encabezó una reunión del Comité de Emergencia creado para combatir la expansión del coronavirus. Destacó las inversiones en salud y asistencia alimentaria que se están llevando adelante junto al Gobierno nacional y minimizó la posibilidad de conflictos sociales.

El Gobernador bonaerense, Axel Kicillof, se refirió, este miércoles, a las medidas que se están tomando en la Provincia ante el brote de coronavirus y desestimó la posibilidad de que se genere un estallido social. Preocupado por el impacto de la crisis en el Conurbano, encabezó una reunión del Comité de Emergencia en La Matanza con la mayor parte de su gabinete, aunque sin el intendente local, Fernando Espinoza. “Me estoy ocupando del tema. Se están tomando las medidas necesarias para asistir a los sectores más golpeados por esta situación económica”, planteó en ese sentido, al tiempo que habló sobre la decisión del Gobierno porteño de cerrar 59 ingresos a la Ciudad de Buenos Aires, ante lo que demandó coordinación.

“Si bien es lógico tomar medidas de restricción y control, los efectos secundarios pueden ser graves. Entiendo que la intención es buena, pero hay que tomar los recaudos y ver la dinámica”, opinó ante la congestión que, este miércoles, mostraron los accesos que quedaron habilitados para ingresar a la Capital Federal y generaron el enojo presidencial. “Esto apela a la responsabilidad social, la gran mayoría sí está cumpliendo con el aislamiento, pero tenemos que garantizar que todos lo hagan”, subrayó el mandatario provincial.

Kicillof llegó a La Matanza acompañado por su jefe de Gabinete, Carlos Bianco; y los ministros de las carteras más calientes por estas horas: Daniel Gollán, de Salud; Sergio Berni, de Seguridad; Fernanda Raverta, de Desarrollo de la Comunidad; y Agustín Simone, de Infraestructura, entre otros. Pese a que Espinoza no fue parte del convite, más tarde, se reunió, en el Palacio Almafuerte, con la vicegobernadora bonaerense, Verónica Magario, junto a quien coordinaron la llegada de cocinas de campaña del Ejército argentino a territorio matancero. Las fuerzas nacionales buscarán garantizar la provisión de alimentos en el Distrito, que se convertirá en una experiencia piloto a replicar en los 134 municipios restantes. 

“Estamos trabajando sin descanso, día y noche, en esta situación extraordinaria e inesperada que pone en tensión un sistema que estaba abandonado hace mucho”, planteó Kicillof sobre la situación de la Provincia, donde “en cantidad de personas, vive el 60 por ciento de las personas que están debajo de la línea de pobreza en el país”, apuntó.

En ese marco, destacó “la enorme inversión en salud” que se está haciendo, junto al Gobierno nacional, para generar más camas de internación con la construcción de módulos hospitalarios en cinco distritos y la apertura de hospitales que estaban paralizados, como el René Favaloro, de Rafael Castillo, al que el Presidente visitó este lunes.

Además, remarcó que se está garantizando la entrega de alimentos a los sectores más vulnerables, por ejemplo, con el mantenimiento de los comedores escolares y la entrega de viandas y bolsones para que las familias “puedan cocinar en sus casas”. “Lo hicimos en tiempo récord. Hay un trabajo en conjunto que es muy esperanzador”, agregó.

En cuanto a la posible extensión de la cuarentena obligatoria, vigente, hasta ahora, hasta el 31 de marzo, el Gobernador aseguró que “es un tema que, todavía, no está resuelto”. “Tenemos que estar sujetos a lo que hace el Estado nacional. Estamos trabajando con el Presidente, las decisiones se tomaron a tiempo y eso nos da un margen para prepararnos lo mejor que podamos. El objetivo número uno es cuidar la vida de los y las bonaerenses”, cerró Kicillof.