Por las subas del gas, más de 200 autos por día dejaron de utilizar GNC y la tendencia se confirma en el Distrito

El GNC aumentó en los últimos seis meses 125 por ciento por lo cual, cada mes, 232 dueños de los vehículos impulsados por gas no renuevan el permiso que los habilita a llenar sus tanques.

El GNC aumentó un 125 por ciento en los últimos seis meses, por lo que, de acuerdo a los registros del Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas), tras seis años de expansión sostenida, el número de vehículos a gas comenzó a achicarse: desde abril, casi 50 mil autos particulares abandonaron el sistema. De acuerdo a fuentes locales, la tendencia se confirma en La Matanza.

En ese sentido, al ser consultado por el programa El día de mañana emitido por Radio Universidad, Emanuel, comerciante de equipos de GNC en San Justo, comentó que “hoy en día, los proveedores de los tanques nos cuentan que se desinstalan 250 equipos por mes porque los automovilistas los están sacando”, ya sea porque el costo del GNC hace que deje de ser redituable o porque los usuarios deciden deshacerse de ellos para venderlos y recuperar el efectivo. “En el furor del GNC, años atrás, se colocaban seis o siete tubos por día pero, actualmente, se colocan seis por mes, si es que llegamos a esa cantidad. Está totalmente parado”, graficó.

De este modo, de acuerdo a los números de Enargas, 232 coches por día dejaron de circular impulsados a gas porque sus dueños no renovaron el permiso que los habilita a llenar sus tanques, ya sea por no haber cumplido con la revisión anual, que cuesta entre 250 y 300 pesos, o por no haber hecho la prueba hidráulica que se exige cada cinco años y que cuesta, aproximadamente, 1.500 pesos.

En este sentido, el comerciante matancero explicó que “colocar un equipo con tubo de 60 litros y quinta generación en un auto mediano cuesta, en promedio, 20 mil pesos” y, por ende, "el usuario que no tiene taxi o remis no lo puede amortizar tan rápido como antes".

En este contexto, además, cabe recordar que, en los últimos doce meses, el GNC se encareció en un 150 por ciento, mientras que la nafta avanzó un 31 por ciento, por lo cual la brecha entre ambos combustibles se redujo y los usuarios decidieron abandonar los tubos de gas para pasar a los tanques nafteros, que mejoran el rendimiento de los autos.

Con respecto a esta situación, Emanuel ejemplificó que “el tanque de GNC de 60 litros, hoy, equivale a poner 15 litro de nafta, solo que cargar 60 litros sale 120 pesos, mientras que cargar 15 litros de nafta está 300 pesos”. Entonces, sostuvo, “el consumo es el mismo, pero lo que convenía años atrás era el precio, que era la cuarta parte con respecto al valor de la nafta”.

Según el Enargas, a nivel nacional, entre abril y octubre la instalación de equipos nuevos cayó a un promedio de 8.082 por mes, frente a 17.481 conversiones mensuales que se daban en 2015 y a las 22.536 registradas en 2014.

Ese descenso fue sentido por los talleres locales, aun a pesar de los planes de financiamiento propuestos por el Gobierno para pagar en cuotas, como Ahora 12, o por el descenso en el costo para los consumidores. “A mí, me bajó 90 por ciento la colocación en el período de abril a octubre y en la Provincia, entre los comerciantes colegas y los distribuidores, creemos que bajó entre un 70 y 80 por ciento”, agregó Emanuel.

Por último, consideró que “el panorama no cambiará, aunque, quizás, cuando todo se normalice, el GNC también lo haga”. “Teníamos siete personas trabajando de los cuales algunos se jubilaron y a otros hubo que despedirlos y al único muchacho que quedó, a veces se me complica pagarle”, lamentó el comerciante.