Malestar en la guardia del Paroissien por la falta de personal y de medicamentos

A raíz del paro efectuado en los 80 nosocomios de la Provincia, varias guardias se abarrotaron de personas. Hubo quejas por demoras en la atención y falta de insumos.

En el marco del paro por 72 horas que convocó la Asociación Sindical de los Profesionales de la Salud de la Provincia de Buenos Aires (CICOP), las guardias de los 80 hospitales bonaerenses se vieron abarrotadas de personas ante la ausencia de consultorios, en consecuencia, los pacientes se quejaron por la falta de personal y de suministros. El hospital Paroissien, ubicado en el Km. 21 de la Ruta Nacional N° 3, fue uno de los afectados, donde el malestar reinaba entre las personas ya que, según ellos, no eran atendidos rápidamente.

“Te anunciás en un mostrador y, si tenés paciencia, esperás a que abran las puertas para que el médico te reciba”, manifestó, a El1 Digital, una mujer que estaba esperando hace horas en la guardia del nosocomio.

Entre las personas que aguardaban ser atendidas, se encontraban adultos mayores y padres con sus hijos. “Trajimos a nuestra beba para que la vea un pediatra porque tiene muchos dolores de panza y queríamos saber qué hacer porque llora constantemente. Por eso, estamos a la espera que nos abran las puertas desde muy temprano”, relató un vecino de Isidro Casanova.

En su mayoría, las quejas se centraron en la atención lenta, la falta de personal e insumos, es decir, los mismos motivos por los cuales los 80 hospitales de la Provincia decidieron realizar un cese de actividades. Sumado a esto, el reclamo de un aumento salarial del 40 por ciento.

Mientras tanto, en los pasillos de la guardia del hospital Paroissien, los médicos y enfermeras no daban a basto porque no solo estaban pendientes de la atención de las personas que se acercaban, sino también de los internados. Así, los profesionales corrían de un sector a otro para no descuidar a ningún paciente. “Esperamos que tengan paciencia, que comprendan que trabajamos para ellos y que no somos sus enemigos”, declaró un enfermero.